El Instituto Gaudí empieza a revestir de colores corporativos la fachada
Enseñanza invierte 97.000 euros en una reforma que «prima el vínculo del centro con la tradición»
Las obras para rehabilitar la parte exterior y «mejorar la imagen» del Instituto Gaudí, impulsadas por Enseñanza y que fueron adjudicadas a mediados del pasado diciembre por un importe de 97.550 euros IVA incluido, están en marcha en el centro, que pronto estrenará una fachada con sus colores corporativos. De hecho, el andamio ya está montado y han empezado a tomar cuerpo las formas geométricas que, en tonalidades lilas y naranjas, cubrirán en los próximos días la cara más visible del edificio. Se trata, en concreto, de una primera fase de reforma del equipamiento, que incluirá dos intervenciones y afectará a la fachada principal y las laterales, y también la zona de acceso al mismo centro y los cierres exteriores.
El proyecto prevé la reparación de «deficiencias existentes» en las instalaciones, entre las cuales había «grietas, algunas finalizaciones|fines pendientes o el soplado de los revestimientos,» las cuales «condicionan el aspecto estético de las fachadas y desvirtúan el aspecto exterior» del Instituto Gaudí, ubicado en la calle Osca del barrio Gaudí y que ofrece estudios de ESO, bachillerato y ciclos formativos. En la rehabilitación impulsada por la Generalitat, y con respecto a la carpintería, «se resolverá la problemática de estanquidad».
La propuesta para el cambio de aspecto del Instituto de Gaudí «prima los colores corporativos del centro, con la vinculación de este con la tradición. De forma simbólica se quiere hacer un gesto a lo que representa y significa en la vertiente histórica el Instituto Gaudí», precisa documento. Este especifica que la voluntad de las obras pasa para «romper con la repetición marcada, simétrica, que actualmente encontramos en los volúmenes existentes. Mediante un juego compositivo y con colores vivos, enfatizando las aperturas con elementos de cierto grosor, se consigue una nueva perspectiva, moderna y renovada del conjunto».
Pintura antigrafiti
Los trabajos que se llevarán a cabo en la primera fase de obras en el Instituto Gaudí se alargarán durante cerca de un mes y medio. Afectarán los revestimientos de la fachada y sus laterales, la sustitución de las ventanas y elementos auxiliares en la planta baja, a la rotulación, la instalación eléctrica y el pavimento, entre otros. Tal como concreta el documento del proyecto, «la acción de la lluvia, la humedad, la contaminación y las modificaciones realizadas en el inmueble han contribuido, a lo largo del tiempo, a la degradación de los elementos más expuestos, deteriorando su aspecto y color iniciales».
El documento técnico recoge, como elemento innovador y al mismo tiempo curioso, el uso de «pintura antigrafiti en toda la zona inferior de las fachadas rehabilitadas hasta 2,20 metros de altura». Con respecto a los revestimientos, hay programadas trabajos de «repicado, limpieza, reparación y tratamiento cromático» de los elementos que lo integran.