La residencia de Horts de Miró de Reus se da de alta pero no abrirá hasta el verano

La Fundación para la Atención Social, parte de Sagessa y que gestionará la futura residencia de Horts de Miró, dio de alta el centro en el registro del Departamento de Trabajo y Asuntos Sociales y Familia a finales de la semana pasada. El trámite, imprescindible para la apertura del equipamiento que se había anunciado inicialmente para diciembre del pasado 2017 y que no se ha materializado todavía, deja paso a uno nuevo: la acreditación y adjudicación de las plazas.

Fuentes del mismo Departamento, que financiará las 24 plazas colaboradoras de las 29 que se ofrecerán, concretan en Diari Més que este segundo procedimiento que ahora se pone en marcha «se alargará durante un margen de entre dos y tres meses». Poniendo el plazo encima del calendario, la entrada en funcionamiento de la residencia se trasladaría en mayo o en junio. La Fundación para la Atención Social ha previsto a su presupuesto de 2018, dentro del capítulo de inversiones, unos 340.000 euros para equipar el edificio, cuya construcción va finalizado en el 2012. Este punto y el impulso al servicio de Atención Domiciliaria han hecho crecer la previsión de cuentas por encima de un 50%.

Con respecto a la veintena de puestos de trabajo que generará la apertura de la residencia y centro de día, el proceso de selección de personal concluyó en noviembre y algunos de los empleados ya se encontrarían en este momento desarrollando trabajos en el edificio. Entre los profesionales que se han incorporado hay diferentes especialidades, tanto de atención directa -gericultor, trabajador y educador social, terapeuta, ocupacional, psicólogo, enfermería, fisioterapia o servicio médico– así como también de atención indirecta –limpieza, cocina, lavandería, mantenimiento o portería. Para llevar a cabo las contrataciones se abrió una bolsa de trabajo. La dirección del centro ha sido también contratada. Desde el Ayuntamiento de Reus, con todo, declinan fijar una nueva fecha para la inauguración de Horts de Miró y se remiten a los efectos de la aplicación del artículo 155, que trabaría la apertura de la residencia.

Equipar el espacio

Ensu momento, la Fundación para la Atención Social recibió concurrencia en todos los lotes para amueblar y habilitar la residencia, aunque en el primer concurso abierto con este objetivo algunos de ellos habían quedado desiertos. Su instalación todavía estaba materializado a finales del pasado mes de febrero. En este sentido, fuentes de Sagessa habían precisado entonces que la lista para llenar las 24 plazas colaboradoras se ofrecería una vez el edificio se encontrara equipado. En el sótano de la residencia y centro de día están previstos los servicios generales del edificio como cocina, lavandería, almacén general, vestuarios de personal y salas de instalaciones. En la planta baja se encontrará el acceso principal. En la segunda planta estará el comedor general de la residencia, la sala de estar del centro y los servicios específicos como son las salas de podología, peluquería, gimnasio, sala de terapia ocupacional y vestuarios de los usuarios del centro de día. En las plantas tercera y cuarta habrá las habitaciones y la sala de estar.

La del Palace, a finales de año

En paralelo, la obra de construcción de la residencia que el Grupo Ballesol levanta a la calle Batan, en terrenos del antiguo Cine Reus Palace, avanza a buen ritmo y fuentes de la promotora que la tira adelante confirmaban hace algunos días a este medio que su finalización está prevista para el último trimestre de este 2018. La fecha de finalización de obra no tiene por qué coincidir con la de la inauguración del equipamiento, que Ballesol tendrá que fijar una vez el proyecto esté recepcionat.