El Barri del Carme crea el delegado de calle para hacer frente a las problemáticas

Los vecinos del Barri del Carme se han organizado con el fin de luchar contra el incivismo, la inseguridad y para contribuir conjuntamente a conseguir un mejor espacio donde vivir. De esta manera han creado la figura del delegado de calle, una persona de cada vía del barrio que se encarga de comunicarse con el resto de habitantes y la junta de la asociación de vecinos con el fin de responder a las problemáticas puedan surgir.

El presidente de la agrupación vecinal, Josep Machado, explica que esta iniciativa «está funcionando desde principios de año» y ya ha dado sus frutos. Cada delegado de calle tiene una comunicación directa con el resto de responsables de las vías y con la junta, hecho que permite «una mejor relación y rapidez a la hora de actuar».

Según explica Machado, la semana pasada «se pudo evitar que se produjera una ocupación en la calle del Arquitecto Pere Caselles». Machado añade que «si son un buen grupo, todos juntos, ya no tienen miedo de enfrentarse a según qué problemas».

El presidente de la asociación de vecinos resume la idea de esta iniciativa defendiendo que es una herramienta para que los habitantes de la zona «cierren filas, porque quieren un barrio más seguro, más limpio y donde se hagan bien las cosas».

Mejora la limpieza

La lucha contra la ocupación de los pisos es uno de los principales caballos de batalla del Barri del Carme pero no es la única problemática en la cual tienen que hacer frente. Algunos vecinos denuncian la acumulación de basura y de muebles en algunas zonas como, por ejemplo, a la calle O'Donnell, donde ha instalado una placa con un número de teléfono donde llamar si se dejan restos de grandes dimensiones.

Machado reconoce que a menudo no se hace caso de esta indicación, aunque defiende que «últimamente vamos mejorando, tenemos que explicar que se tiene que llamar antes de dejar los muebles o insistir en que tiren la basura|maleza de noche».

Comunicación directa

La existencia del delegado de calle hace más próxima la comunicación de los vecinos con la asociación, ya que esta figura es un nexo de unión entre estos dos actores. Además de poder hacer frente a las problemáticas del barrio, también contribuye a una mejor relación: «Si hay una junta, cada delegado se puede encargar de repartir la convocatoria en su calle, así nos aseguramos de que llegamos a todo el mundo», explica Machado.

En los primeros tres meses, la iniciativa cuenta con una treintena de delegados, que se suman a la veintena de integrantes de la junta directiva de la asociación. El objetivo es llegar a representar las 47 calles que conforman el Barri del Carme.