En 25 pisos gestionados por Habitatge en Mas Pellicer viven ocupas

Hasta 25 de los pisos que la Agència d'Habitatge de Catalunya gestiona en Mas Pellicer y su entorno están, hoy, ocupados de manera ilegal. Uno de ellos era lo que, el viernes pasado, se convirtió en origen de un incendio que afectó a la fachada y algunas partes del interior del número 43, que movilizó cinco dotaciones de bomberos y de dónde tuvieron que ser evacuadas a Hospital Sant Joan cuatro personas por intoxicación de humo, una de ellas menor. El director de los Serveis Territorials d'Habitatge, Josep Maria Juncosa, concreta a Diari Més que el piso en cuestión, que «ha quedado inutilizado para vivir allí» se encontraba denunciado tanto al juzgado como Mossos D'Esquadra, y a la espera de fecha de lanzamiento.

Es esta situación irregular, apunta, la que impedirá que los daños que originó el fuego se reparen «hasta que Habitatge no pueda entrar». En el resto del edificio, los trabajos en este sentido arrancarán «en dos o tres días». Ya se llevó a término, de hecho, una primera intervención para «recuperar los suministros, porque a causa del fuego el bloque había quedado sin electricidad ni agua». En las próximas horas se tendrá que limpiar la fachada, probablemente la escalera y reemplazar algunos cristales de ventana rotos.

Desde la Associació de Veïns I de Maig, el presidente Eduardo Navas explica que la madre que vivía allí, con su hijo, ha abandonado recientemente el inmueble, que ninguno de los dos había vuelto a dormir y que ayer a primera hora se instaló una puerta blindada de las que se colocan habitualmente para evitar ocupaciones. Navas precisa que «parece que las llamas empezaron por una estufa», a pesar de la época del año, y que «se propagaron porque en la casa había muchos colchones».

Dos informes pendientes

Vivienda espera ahora dos informes. Uno que ponga negro sobre blanco la causa del incendio y otro, del arquitecto municipal, que certifique el estado del número 43, donde el viernes se colocaron algunos puntales de manera meramente preventiva. Sobre la tesitura en que han quedado los habitantes del piso principalmente afectado, Josep Maria Juncosa concreta que «si se encuentran en situación de vulnerabilidad, no tienen otra vivienda o necesitan ayuda, hace falta que se enderecen a los Servicios Sociales para que los podamos incluir en la Mesa de Emergencia y buscarles un nuevo sitio». Si el juez hubiera fijado ya una fecha de lanzamiento o si el piso se declara inhabitable, este trámite también se da. En Habitatge no consta, sin embargo, que la familia que ocupaba ilegalmente el piso haya dado este paso al menos hasta ayer mismo al mediodía.

El de las ocupaciones ilegales no es un problema nuevo para I de Maig, que justo en febrero arrancó el compromiso de Habitatge de hacerse cargo de los desperfectos que originaran los ocupas en los bloques que no son íntegramente gestionados por la Generalitat. En este sentido, Juncosa precisa que «los desperfectos que puede haber son resultado de los que comporta el momento de realizar la ocupación, como daños en las puertas en los armarios de contadores al momento de engancharse a los suministros». Hasta ahora, sin embargo, «no hemos tenido que hacer ninguna intervención por esta cuestión», asegura.