Un problema de TUI con la facturación cuestiona la capacidad del Aeropuerto

Un problema informático en el sistema de facturación de TUI, que se dio en todos los aeropuertos donde la compañía opera, generó ayer al inicio del día colapso y largas colas de viajeros en la terminal del Aeropuerto de Reus donde, según apuntaban fuentes de los trabajadores, se llegó a superar la cifra de los 900 pasajeros por hora que las instalaciones están preparadas para absorber. Aena, que detallaba que la incidencia había quedado resuelta a media mañana, negaba la saturación del edificio pero reconocía retrasos de hasta dos horas en algunas de las conexiones. Ayer, en toda la jornada, había programados un total de 20 vuelos de salida y 20 de llegada a Reus.

Se da la circunstancia de que, en el equipamiento de la capital del Baix Camp y a diferencia de otros, el handling del global de las aerolíneas que realizan movimientos está en manos sólo de dos de ellas: Iberia y TUI. De aquí que las demoras no se limitaran a los aviones de la operadora belga. La misma web de Aena reflejaba ayer retrasos al menos en los enlaces con Londres Luton, Londres Gatwick, Cardiff, Newcastle, Eindhoven (Ryanair), Dublín (Ryanair), Manchester (Thomas Cook), Leeds (Jet2) y también Birminghan.

La incidencia de TUI provocó que, durante un cierto margen de tiempo, los pasajeros no pudieran embarcar y, por lo tanto, los aviones permanecieran en la plataforma. A su vez, la acumulación de aviones en la plataforma obligó a desviar dos helicópteros del ejército que tenían que realizar prácticas rutinarias. Aunque no llegan a tocar pista, los helicópteros sí que utilizan las instalaciones para llevar a cabo acercamientos.

Fuentes de Aena precisaban que el problema al sistema de embarque se pudo resolver «reiniciándolo» e insistían en el hecho que «una buena parte de los retrasos fueron de entre cinco y diez minutos, cosa que puede ser frecuente en todos los aeropuertos». Aclaraban, igualmente que en ningún caso la situación tuvo que ver con el Aeropuerto de Reus, sino que respondía a la incidencia informática repentina al embarque de la compañía belga TUI.

Adaptar la inversión a la demanda

El Plan Director del Aeropuerto de Reus 2006-2013, todavía pendiente de ejecutar en una proporción importante, preveía una nueva terminal que habría cuadruplicado la capacidad del actual. También el Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA) 2017-2020 programaba una ampliación hasta los cerca de 1.200 pasajeros por hora. Fuentes próximas al Aeropuerto explicaban ayer que esta ampliación, que «igualmente quedaría pequeña», se alargará «durante tres temporadas» turísticas, de manera que las obras se irán realizando «a lo largo de los meses de menos actividad, en invierno, y se detendrán en verano». Explican, también, que la previsión es que el equipamiento despida este 2018 fregando a los 1.200.000 pasajeros. A febrero, y al Senado, el ministro Íñigo de la Serna negó que el Ministerio de Fomento incumpla los compromisos presupuestarios y de inversión en el Aeropuerto de Reus, uno de los aeródromos con más crecimiento de tráfico del Estado, y aseguró que tanto Fomento como Aena adecuarán sus futuras inversiones a la demanda de tráfico de las instalaciones.