Urbanismo rehace el proyecto de acera y carril bici entre Blancafort y la T-11

El proyecto de acera y carril bici que tenía que conectar la urbanización Blancafort con la T-11, reclamado por el vecindario desde el 2015 y todavía pendiente de ejecución, vivirá cambios. El Ayuntamiento prevé iniciar, en un margen de entre dos y tres meses, un replanteamiento del redactado que ya dejó terminado casi un año atrás y que habrá de «adaptar-se» ahora a «mejoras que la Generalitat ha asumido como propias en el tramo de carretera» y que comportarán «hacer una ampliación, todo y que la mayoría –de la documentación anteriormente prevista– es aprovechable», apuntan fuentes municipales al Diari Més.

Las mismas fuentes concretan que el compromiso con Blancafort pasa por culminar la reformulación del proyecto a lo largo del 2018, y que con esta voluntad hay una partida reservada. Las obras, con todo, quedarán pendientes de poder incluirse a los presupuestos 2019. Fuentes del Departamento de Territorio consultadas sobre la intervención en la carretera de Cambrils se limitaban a precisar que «el proyecto lo está redactando el Ayuntamiento». A su vez, desde la Asociación de Vecinos de la urbanización Blancafort, el presidente Bartolomé Pluma aseguraba ayer no haber abordado recientemente esta cuestión concreta con el Ayuntamiento, ni haber recibido el compromiso del redibujo de la acera.

Problemas de seguridad

Del que sí que han hablado con Urbanismo, explicaba Pluma, era de la situación de la rotonda de acceso a Blancafort desde el Tenis Monterols, la cual tenía que haber quedado completamente inutilizada pero lo está sólo provisionalmente, de manera que los coches la utilizan para ahorrarse vuelcos y generan situaciones que podrían ser peligrosas». Para evitar el uso, el Ayuntamiento ha instalado recientemente en este punto pilones new jersey, pero la Generalitat todavía no materializa «lo que nos dijeron que se haría, que es cerrarlo de forma definitiva».

Sobre la acera y el carril bici, el presidente de la Asociación de Vecinos de la urbanización Blancafort recuerda que «no es que sea necesaria sino que es indispensable» y explica que «siempre tenemos la duda de por qué el Tenis Monterols no se implica al reivindicarla». Justo el año pasado, el atropello de un ciclista evidenció la conveniencia de realizar esta mejora en la carretera que ha pasado por diferentes formas en los últimos tiempos sin que hayan todavía empezado los trabajos para llevarla a la realidad. La colocación o no del carril bici y la ejecución o no del sistema de drenaje han sido puntos que han centrado el debate mientras la acera no llega.

Inicialmente, estaba concebida como un tramo de 200 metros para dar continuidad a la reforma que ya se hizo a partir del santuario de Misericordia, y contemplaba una anchura de aproximadamente dos metros con un carril bici incorporado al interior. Los vecinos llevaron a cabo, al principio del 2017, movilizaciones en forma de marchas por la carretera reclamando la creación de este enlace a pie con la T-11.