El TSJC detecta «graves problemas de congestión» en los juzgados de instancia

El Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) ha detectado «graves problemas de congestión» en la jurisdicción de primera instancia de Reus, en especial al número 1, y también a determinados juzgados de instrucción. En este sentido, pide al servicio de inspección del Consell General del Poder Judicial (CGPJ) «que se aborde la situación de grave retraso y significativas disfunciones» que muestran algunos de los órganos. La Sala de Govern del TSJC ubica la realidad del partido judicial entre las «particularmente preocupantes» localizadas en una de las últimas sesiones en Tarragona, el 6 y el 10 de abril, y ha aprobado este mes de julio una veintena de medidas orientadas a corregir diferentes escenarios de colapso y casuísticas diversas en la demarcación. La puesta en marcha, en pocas semanas, del nuevo juzgado de primera instancia 7 dedicado a familia tendría que contribuir a paliar la saturación en Reus. El TSJC insta también al Departament de Justícia a que active los recursos necesarios por su entrada en funcionamiento, prevista para el 31 de septiembre.

La saturación de los juzgados de Reus no es una cuestión nueva. El presidente del TSJC, Jesús María Barrientos, reconocía al desenlace de la sesión de abril que los juzgados de primera instancia de Reus ingresan más del doble de asuntos de lo que establecen los módulos del CGPJ y admitía una coyuntura delicada al juzgado de lo social. Es a raíz de aquella cita, que se produjo ahora hace cuatro meses «para recavar de primera mano, y por parte de los colectivos concernidos en la Administración de Justicia, aquellas informaciones que permitan valorar la actual situación», que la Sala de Govern saca adelante la implantación de 18 disposiciones para corregir desequilibrios.

Una de ellas pasa para «mantener, en la medida en que sea posible, los actuales planes de refuerzo y, en su caso, promover o procurar un plan específico en relación en el juzgado de instancia número 1 de Reus». También promover un plan específico de refuerzo transversal de funcionarios para los juzgados de instancia número 2 y 3.

Equilibrar el social con Tortosa

El del exceso de trabajo no es, con todo, el único problema que acarrea el partido. Por eso, en detalle y en referencia a Reus, entre las nuevas medidas el TSJC ha acordado «analizar y, en su caso, evaluar, las disfunciones reveladas por diferentes profesionales en relación a la tramitación procedimental de asuntos y organización de las oficinas judiciales de los juzgados de instancia». También «identificar qué soluciones se podrían adoptar, en particular fórmulas de unificación de criterios». Un encargo, este, que se pone en manos del Audiencia provincial. El Tribunal se compromete a «mantener el juzgado bis de refuerzo para los juzgados de lo social de Tarragona y Reus y abordar, procurando el consenso de todos los interlocutores afectados, la redistribución de asuntos por|para criterios de proximidad entre el juzgado de lo social de Reus y el de Tortosa».

Sobre este último punto también se había pronunciado Barrientos a principios de año, cuando había anunciado estudiar que los municipios más próximos a las Terres de l'Ebre se adscribieran a la jurisdicción social de Tortosa para tratar de descargar Reus. En la actualidad, y tal como explicó entonces el presidente del TSJC, Tortosa ingresa la mitad de asuntos que Reus.

La valoración del TSJC concluye «una situación general de progresión de los marcadores de eficacia y adecuación de la respuesta jurisdiccional a la entrada de asuntos» aunque «en algunos territorios la situación se tiene que calificar de muy preocupante». Los otros dos escenarios «particularmente preocupantes» para el TSJC, aparte de Reus, son «el colapso estructural en la tramitación de ejecutorias en los juzgados del Vendrell» y la «grave situación organizativa del partido judicial de Valls que afecta a otros órganos».