La Ginesta, el primer jardín de infancia en activar los jardines educativos

Los jardines de infancia municipales convertirán sus patios en jardines educativos que supongan «un recurso más de los propios centros» y pongan en valor el potencial del espacio como «lugares pedagógicos de juego, de experiencia y de aprendizaje, pensados para el desarrollo de los niños». Pocas semanas después de que el Ayuntamiento anunciara la propuesta, que implicará a los seis centros que forman parte de la red, el proyecto para aplicar estos planes en la primera escuela ya está redactado y atraviesa ahora la fase de exposición pública. Se trata del de La Ginesta, en el barrio Gaudí, las obras por la quequedaron aprobadas mediante un Decreto de Alcaldía el pasado día 10 de agosto.

La concejalía de Ensenyament trabaja en este aspecto guiada por un plan director, denominado Jardines educativos de los jardines de infancia municipales. El documento define las actuaciones que se realizarán en cada centro a fin de que los niños puedan encontrar diferentes posibilidades de juego, de descubrimiento, de movilidad, de escondite o de tranquilidad. La idea general es aprovechar los elementos naturales de los patios, relacionarlos con el resto de elementos, e integrarlos con el paisaje y el entorno, de acuerdo al proyecto educativo de los centros.

Sombra, arbolado y experimentación

El documento, encargado por el Ayuntamiento al arquitecto Lluís Salat, incorpora fichas con las propuestas pedagógicas y las intervenciones a realizar en cada uno de los seis jardines de infancia municipales. El plan director calcula una aproximación económica del conjunto de las acciones, de 135.000 euros. Actualmente se están elaborando los proyectos específicos para el resto de las escuelas, después que el que afectará a La Ginesta haya visto la luz.

En el caso concreto de la Ginesta, tal como explicaron desde el Ayuntamiento en su día, la propuesta pedagógica tiene como objetivo favorecer el juego libre del niño, facilitando que decida por él mismo con qué material quiere jugar, utilizando su creatividad, imaginación, destreza o fuerza. La intervención aumenta las zonas de sombra con diferentes pérgolas, y naturaliza el espacio con un perímetro verde, nuevo arbolado, la mejora del huerto, y nuevos elementos de juego: paneles musicales, mesa de experimentación, camino sensorial, elementos de juego simbólico, entre otros.

La idea enlaza con el cambio de modelo pedagógico que está implantando en los últimos años la red municipal de jardines de infancia dentro de las aulas, y que promueve la libre circulación de los niños por los diferentes espacios del equipamiento para fomentar su autonomía y libertad de actuación, con el fin de promover su desarrollo evolutivo.