Fuego y luz; la Carretillada del Ball de Diables en el Santuari de Misericòrdia

Aunque el Ball de Diables de Reus tiene un gran protagonismo en las dos fiestas mayores de la ciudad, las fiestas de Misericòrdia tienen una importancia especial para esta entidad reusense dedicada al fuego. Y es que el día 25 de septiembre, los diables protagonizan uno de los momentos más emblemáticos de las fiestas; la Carretillada en el Santuari de Misericòrdia.

Después de la Baixada, en que diables pequeños y grandes recorren el paseo de Misericòrdia haciendo estallar carretilles y llenando de fuego el camino principal hacia el Santuari, un acto que empieza a las siete y media de la noche, cuando en la plaza del Santuari está la actuación castellera de los Xiquets de Reus, y los bailes de los otros elementos del Seguici Festiu, el Ball de Diables se va acercando a Misericòrdia mientras se va haciendo oscuro, una llegada gradual del fuego, es el preludio de uno de los momentos más esperados de la fiesta.

Precedido por la Víbria, que empieza a llenar de fuego la plaza del Santuari con su baile, y el Drac de Reus, que da paso a los diables con una danza llena de luz y pólvora, llega el momento de prender fuego a Misericòrdia, de manera simbólica.

Después de ensayar durante semanas la coordinación, el ritmo y los cambios en el tipo de pirotécnica que tiran, el Ball de Diables llega a su gran acto de Festa Major, su baile de lucimiento particular, la Carretillada.

Fuego en el Santuari

Hacia las nueve y media de la noche, y durante unos veinte minutos, el Santuari de Misericòrdia cambia de color, de iluminación, de banda sonora, e incluso, de temperatura. La Carretillada empieza con los avisos de honor, un reconocimiento que el Ball de Diables hace a personas o entidades que realizan una tarea destacada por la cultura y las fiestas tradicionales en la ciudad, este año, este reconocimiento será para el Club Natació Reus Ploms, en conmemoración de su centenario, para la Pastisseria Huguet, por la promoción de la Festa Major a través de las figuras de mona del Seguici Festiu de la ciudad, y para Francesc Mercadé, por su trayectoria de 50 años como diable.

El toque de los tambores

Después de unos segundos de oscuridad y silencio, es el turno de los tambores, los instrumentos de percusión que acompañan los diables, de dar el toque de inicio del acto de fuego, lo hacen, con el toque del Ball de Diables de Reus, y normalmente, arrancan el acompañamiento del público, que se une dando palmas al mismo ritmo.

Y entonces, arranca el fuego, los diables empiezan a bailar y moverse por delante del Santuari de Misericòrdia, utilizando las columnas del edificio como referencia, y combinando varios tipos de pirotecnia, para llenar de fuego la entrada del templo. La Carretillada, también consta de otros puntos de fuego, colocados alrededor y en el terrado del Santuari, para completar la imagen infernal.

La historia del Ball de Diables de Reus y su vinculación en las fiestas de Misericòrdia, fecha del siglo XVIII, todo y que los documentos que hay, sugieren que podría haber habido actividad similar a la que hacen los diables, con anterioridad. El actual Ball de Diables de Reus, sin embargo, fue fundado el año 1981, vinculado a la entidad reusense Carrutxa, y en 1990 se constituyó con el nombre actual.