Los grafiteros contraatacan y nuevas pintadas desafían Pellicer

Pocas horas después de que el alcalde de Reus, Carles Pellicer, compareciera ante los medios para hacer pública la identificación y denuncia de dos jóvenes que habían pintado más de 500 grafitis por todo el municipio, y anunciara mano dura contra los incívicos y los «sucios», en el centro de la ciudad han aparecido nuevos garabatos, estampados sobre mobiliario urbano, que van dirigidos directamente al alcalde. En una de las jardineras de la calle Monterols, a la altura del número 36, alguien ha dibujado una cara y ha escrito, en amarillo, C. Pellicer. El alcalde ya confirmó, el jueves, que «no nos temblará la mano» para aplicar la Ordenanza de Civismo, especialmente contra aquellos que «hacen caso omiso» e incumplen algunos de los artículos de manera reiterada.

En la misma comparecencia, Pellicer, al lado del concejal de Seguridad Ciudadana, Joaquim Enrech, y de un agente de la Guardia Urbana, había avisado a los quienes» hacen pintadas «que se lo piensen dos veces antes de actuar». Y es que las dos personas que fueron denunciadas, dos chicos de 20 y 24 años vecinos de Reus y que firman como Pof y Yuris, se enfrentan a una sanción de 1.200 euros por incumplimiento de la Ordenanza de Civismo, entre 6 y 24 meses de multa por delito de daños con la cantidad que pueda determinar el juez por 8 denuncias de propietarios de establecimientos y del Ayuntamiento que implican costes de limpieza valorados en unos 480 euros, y otros 2.400 por reiteración. Las más de 500 pintadas representan daños al patrimonio por valor de 20.000 euros, que también podrían acabar pagando.