Una década relatando la historia del cementerio de Reus a la luz de las velas
Sor Lluïsa Estivill, Cipriano Martos o el Dr. Frias reviven en las visitas nocturnas de Todos los Santos
De los grandes mausoleos a la fosa común, las visitas nocturnas al Cementiri General de Reus encendieron ayer sus particulares velas para celebrar una década de relatos explicados, a pie de tumba, por Sor Lluïsa Estivill, el doctor Alexandre Frias o Cipriano Martos. Y por difuntos no tan célebres que encarnan añicos cruciales de la historia del municipio. En total, 25 voces emergen del silencio en el transcurso de este trayecto entre sepulturas, dividido en tres partes y conducido por el general Prim, un vecino del siglo XIX y uno del siglo XX, que recuerda que la muerte a todos nos iguala.
Las invitaciones se agotaron el jueves pasado, una hora después de que empezaran a ofrecerse. La luna llena presidió anoche el primero de los recorridos, que se sucederán hoy y mañana. El mismo Prim recibió a los visitantes, s las puertas de su mausoleo, con una pregunta casi familiar para los muchos que han participado ya más de una vez en la actividad: «¿Espera a alguien»?.
La Gata Borda es una vez más, y por décimo año, la encargada de dramatizar las visitas, que han vivido tres replanteamientos desde sus inicios, el último de los cuales ahora hace cinco años. Llegados al jueves, junto a Todos los Santos, se habrán hecho más de 85 pases. La parte de la fosa común, donde se explica la muerte de «gente del pueblo», resulta la más espectacular. También la de las capillas, que completa la voluntad de «variar y dar una muestra de todas las capas sociales». El doctor Frias, que apareció por primera vez en las visitas el 2017, está todavía presente este año, aunque con menos escenas.
Las experiencias pequeñas
Desde La Gata Borda, Antoni Veciana explicaba ayer que, además de mostrar el patrimonio, «hablamos de personajes que son de Reus y han sido enterrados en el cementerio o que no son lo son pero también se han enterrado aquí» y decía que «el hecho de que las entradas se agotaran tan rápidamente es una muestra que lo estamos haciendo bien y la fórmula funciona». Sobre la experiencia de los visitantes, Veciana apunta que «lo que más gusta son las pequeñas historias, las de las personas que no son célebres, porque uno puede ver identificado». A corto plazo, hay la intención de reformular en algún aspecto las visitas.