CUP, PP y vecinos reclaman que el parking exterior del Sant Joan sea gratuito

CUP, PP y Federació d’Associacions de Veïns de Reus (FAVR) mostraron ayer su rechazo a la decisión tomada por el gobierno y anunciada este lunes, en acuerdo con PSC y Cs, de pavimentar el solar que hace de parking delante del Hospital Sant Joan, convertirlo en zona azul y aplicar una tarifa de 50 céntimos la hora y 2 euros al día. Consideran que el espacio, a pesar de que con la reivindicada intervención de asfaltado, tendría que seguir siendo gratuito.

El grupo municipal cupaire expresa, a través de un comunicado, que «la CUP apostamos por la gratuidad y por la gestión pública de todos los recursos y servicios que ofrece el municipio». El concejal Oriol Ciurana explica en el mismo comunicado que, aunque las nuevas tarifas «no son caras, estamos normalizando que la ciudadanía tenga que pagar para absolutamente todo», en lugar de mejorar las líneas de autobús y ofrecer aparcamiento gratuito a los usuarios de la sanidad como plantea el grupo de la izquierda independentista. Por lo tanto, la propuesta de la CUP se basa en que, con la adecuación del terreno, el parking exterior del Hospital pase a ser de zona blanca. «Ni que sea por la amortización de un espacio, no puede ser que la empresa pública Reus Mobilitat i Serveis busque obtener beneficios de un servicio público como el acceso a la sanidad», añade Ciurana. Así, los cupaires sospechan que «se dinamizan proyectos de este tipo con el horizonte de la campaña electoral del 2019, sin valorar las ventajas y los inconvenientes».

Con respecto a la integración del parking subterráneo del Hospital Sant Joan en la red municipal de aparcamientos, Ciurana asegura que con esta operación «se tapa el error de haber privatizado el servicio de aparcamiento del Hospital en su momento». La CUP considera que «desde el minuto uno» el parking tenía que ser gestionado por Reus Mobilitat i Serveis. Ciurana concluye que «una empresa municipal no tiene que poner sus recursos para que una privada saque beneficios, sino que tiene que estar al servicio de las personas».

Un «acuerdo forzado»

También en una nota, el portavoz del PP, Sebastià Domènech, acusa al alcalde de Reus, Carles Pellicer de «ceder a un acuerdo forzado que no nos beneficia» ya que el concesionario del aparcamiento subterráneo del Hospital «había interpuesto un pleito en contra del Ayuntamiento y en defensa de sus intereses» después de que el alcalde «anunciara la pavimentación de los terrenos y no se contemplara ningún acuerdo con la empresa». El popular reclama rigor a Pellicer porque «cada vez que hace un anuncio a nivel local, o dice medias verdades o verdades a medias». El PP se abstuvo el lunes en la votación de los consejos de administración que han facilitado la implantación del sistema de zona azul en el solar –y las nuevas tarifas de 4 euros al día en el sótano del Sant Joan y de 1 euro al día en el edificio del Tecnoparc– porque «la operación a que tendrá que hacer frente Reus Mobilitat i Serveis se prevé en torno a un millón de euros» y se tiene que asumir la gestión del parking de La Fira, deficitario» más «los costes de modificación de dos parkings por valor de 350.000 euros».

Cafetería y televisión

Por su parte, el presidente de la FAVR, Valentín Rodríguez, recuerda que «el solar del Hospital es de titularidad municipal y, por lo tanto, es de todos los vecinos, no es del Ayuntamiento» y lamenta que «el precio de aparcar se sume al de la de la cafetería, que tiene tarifas muy altas, o la de la televisión.» Rodríguez valora que la zona azul «tiene una trampa» porque, «cuando uno va al Hospital, nunca sabe el tiempo exacto que estará. Por eso, aunque la hora se pague a 50 céntimos, todo el mundo pondrá los 2 euros para evitarse acabar con una multa». Y dice que la rebaja de precios en los pàrquins subterráneos acabará con el vigente «abuso». La FAVR convocará en los próximos días una asamblea donde abordar el tema y «estudiar acciones de protesta» para revertir la aplicación de la zona azul. Rodríguez denuncia que «no puede ser que ahora se tenga que pagar para ir al Hospital» y puntualiza que, aunque la visita al equipamiento «sea cada vez más cara» faltan «servicios tan básicos en este siglo como el wifi».