Judicial
Fiscalía recopilación que grupos de 100 a 400 personas protegían diez colegios en Reus el 1-O
Actas policiales citadas en el decreto que archiva la causa para Pellicer dicen que los espacios cerraron el 29 de septiembre
Al menos diez espacios «propiedad del consistorio» se abrieron en Reus durante el 1-O, según recoge el decreto de la Fiscalía al que ha tenido acceso el Diari Més y que acuerda el archivamiento de la investigación iniciada contra el alcalde, Carles Pellicer, por su supuesta participación en la organización del referéndum. La información, extraída de las actas policiales de Mossos d'Esquadra e incluida en la resolución, dice que, el 1 de octubre del 2017, los agentes «acreditan la presencia en estos centros de grupos de entre 100 y 400 personas, tanto en el interior como en el exterior, que impedían el acceso de los agentes al interior de los centros y su cierre». También que, en algunas ocasiones, «después de dejarlos entrar y observar la presencia de material propio de la votación» las mismas personas igualmente «han impedido el cierre» de los colegios electorales. La misma información detalla que el 29 de septiembre «todos los espacios inicialmente dispuestos como centros de votación están cerrados y sin personas en el interior, a excepción de dos».
Estos dos son «el CEIP Teresa Miquel i Pàmies, donde se encontraban 16 personas en las 20.50h realizando actividades deportivasmanifestando el responsable de las actividades que el centro cerraría al acabar» y «el CEIP Joan Rebull, donde se encontraron 7 personas realizando una actividad extraescolar del AMPA, con el aula de teatro abierta y un grupo identificado de personas realizando actividades deportivas y lúdicas». El decreto de archivamiento especifica que «la dirección y gestión de los centros corresponde a la Generalitat».
El total de los que la documentación concreta como abiertos el 1-O son los colegios Cèlia Artiga, General Prim, Joan Rebull, Misericordia, Pompeu Fabra, Rosa Sensat, Rubió i Ors, Teresa Miquel, el Pavelló Olímpic Municipal y el Polilleuger Ciutat de Reus. En las actas, tal como recoge el decreto, «todos y cada uno de los responsables de los centros manifiestan no haber recibido peticiones de sus superiores solicitante su colaboración en la celebración del referéndum suspendido del 1 de octubre».
El secretario del Ayuntamiento certifica que «no consta en los expedientes y registros municipales ninguna resolución, acuerdo o documento donde se determine que locales de titularidad municipal hayan estado dispuestos y abiertos» para votar. El decreto concluye que «no ha podido acreditarse que en los hechos ocurridos el 1 de octubre del 2017 haya tenido participación el alcalde de la localidad de Reus», Carles Pellicer, para el que la Fiscalía ha archivado la investigación.
La Fiscalía también ha archivado la causa contra el alcalde de Torredembarra, Eduard Rovira; el de Deltebre, Lluís Soler; el de Amposta, Adam Tomàs; y la alcaldesa de Cunit, Montserrat Carreras. Con respecto a Amposta, siempre en base al decreto, actos policiales acreditan que todos los centros de titularidad municipal se encontraban cerrados y sin personas el 1-O. Y en Cunit en la misma línea, el decreto de archivamiento dice que «ningún bien inmueble del consistorio fue utilizado como punto de votación». En Deltebre, los centros eran «de la Generalitat» y en Torredembarra tampoco «consta ninguna autorización realizada por el alcalde» pero se siguen diligencias previas al juzgado de instrucción número 3 por un concejal que se habría identificado a él mismo como responsable de la ocupación de centros.
Pavelló Firal de la Ràpita
En el caso del alcalde de Sant Carles de la Ràpita, Josep Caparrós, la causa no se archiva y las actuaciones han sido remitidas al juzgado de primera instancia e instrucción número 4 de Amposta, donde se están investigando hechos relacionados con la apertura del Pavelló Firal. El decreto de la Fiscalía recopila que este espacio, que «es de titularidad municipal» fue cerrado durante la jornada del referéndum por la Guardia Civil y que, después, «el alcalde procedió a subir a un escenario» y «se dirigió a alrededor de 250 personas que se encontraban allí» «diciendo que se procedía a la apertura del colegio para que la gente pudiera votar». Los Mossos lo pusieron en conocimiento de la sala de control.