Municipal
Pellicer: «Mi compromiso con los encarcelados no está en duda»
El alcalde no cuelga el #FakeJustice que pedían ANC y CUP y responde de que mantendrá la pancarta de ‘Libertad presos políticos’
El alcalde de Reus, Carles Pellicer, expresó ayer, en el transcurso de la sesión de lleno de febrero, que «el Ayuntamiento, gobernado por el PDeCAT, ERC y Ara Reus, ha estado y sigue estando al lado del Gobierno del país» y subrayó que «este compromiso se ha podido visualizar, a lo largo del mandato, en las decisiones adoptadas en este plenario y también en las que he adoptado como alcalde, consciente de mi situación, arriesgándome a procesos penales tanto yo como otros concejales de este consistorio.» «Mi compromiso institucional y personal con el Gobierno y con los consellers encarcelados injustamente», precisó, «no está en duda». El alcalde contestó de esta manera a una serie de preguntas del grupo municipal de la CUP, formuladas por su portavoz Marta Llorens, y que pedían, entre otros puntos, «de qué manera responderá el Ayuntamiento cuando se requieran medidas extraordinarias a nivel de posicionamiento político durante los juicios» vinculados al 1-O.
Las cuestiones que planteó, en el turno de preguntas, la formación cupaire tenían que ver con la decisión del gobierno, tomada durante la concentración del pasado 1 de febrero, de no permitir que se colgara del balcón del palacio municipal una nueva pancarta con el lema #FakeJustice. La Asamblea nacional Catalana (ANC) había hecho un llamamiento público a los «socios y simpatizantes» de la entidad para que acudieran ayer al salón de plenos a reclamar que el gobierno hiciera marcha atrás en este extremo. En un comunicado, desde l'ANC apuntaban que «somos conscientes de las presiones que debe recibir el alcalde de una ciudad como Reus, pero pensamos que se equivocó. La situación que están viviendo los presos y los presos políticos, así como las personas exiliadas, está fuera de toda normalidad. Es el momento de denunciar la utilización arbitraria que hace el Estado español de la Justicia». La respuesta al llamamiento, con todo, acabó siendo probablemente fuerza más discreta de lo que se esperaba.
Ante esta reclamación, Pellicer se dirigió a los concejales de la CUP para asegurar que «son sabedores de las reiteradas instancias y denuncias que grupos municipales han presentado para denunciar la presencia de la pancarta de Libertad presos políticos, que tenemos en la fachada del Ayuntamiento y que seguirá colgada mientras yo sea alcalde y haya personas presas por motivos políticos». «Saben que la pancarta nos ha traído muchos quebraderos de cabeza y que la he defendido y la seguiré defendiendo siempre, arriesgando lo que convenga,» añadió Pellicer, que apuntaba, sin llegar a referirse en ningún momento de forma explícita al #FakeJustice o l'ANC, que «este gobierno entiende la pancarta –la de Libertad presos políticos– como un clamor transversal sobradamente compartido por la ciudadanía y no como una campaña de parte de una entidad u otra. Libertad presos políticos es una reclamación justa y un posicionamiento político que supera el marco de los partidos y de las entidades civiles y, por eso, este Ayuntamiento le da apoyo».
Salvaguardar la institución
En el mismo comunicado, que fue emitido este sábado, desde l'ANC habían recordado al alcalde que «no hacer nada o no dejar que se haga nada, da alas a la injusticia que va en contra de los derechos de toda la ciudadanía, piense de una manera o piense de otra», y valoraban que «el hecho de tener dicha pancarta –la de #FakeJustice, en el balcón del Ayuntamiento resulta una forma de denunciar el embate del Estado español y el poder judicial hacia nuestros derechos. Pellicer finalizó ayer valorando que «si plantean esta cuestión para atacar y desmerecer mi compromiso nacional, son libres de hacerlo. Sin embargo, mi obligación es también salvaguardar la institución, asumiendo las consecuencias judiciales que se deriven». Lo saben y saben que las afronto». Y reiteró el compromiso, eso sí, que «mantendremos la pancarta de Libertad presos políticos allí donde le toca mientras haya presos políticos».
La CUP también había preguntado en relación a la presencia de mesas de Vox en el municipio –una de las que se colocó ayer en la plaza del Gegant Indi – y sobre si el gobierno tenía previsto tomar alguna determinación para evitar que se siguieran instalando en Reus. En este aspecto concreto, el alcalde apuntó que «el Ayuntamiento tiene la obligación de tratar todas las peticiones de ocupación de la vía pública, sean de la entidad que sean y nos gusten o no. Desgraciadamente, eso es así. Lo entiendo pero no le corresponde a la administración actuar con ninguna discrecionalidad o prevaricando, y censurando partido políticos legalmente constituidos». «Entiendo que Ustedes sí que actuarían con censura y discrecionalidad, y yo no», dijo, dirigiéndose a los concejales cupaires, y apuntó que «a los rivales políticos, se los gana a las urnas y con votos», dijo.
«Por eso», añadió, «responderemos como siempre hemos hecho, actuando cívicamente, pacíficamente, preservando la convivencia y más determinados que nunca con la democracia, la libertad y el clamor por|para una justicia justa». Ya fuera de las preguntas, el alcalde aprovechó para añadir que «cuestionar la actitud y el compromiso de este gobierno y el mío como alcalde con el país, el gobierno de Cataluña y los presos políticos sabiendo que estoy siendo perseguido judicialmente para el 1-O y que lo volvería a hacer, no me parece bien y es un error para todo el mundo».
El nuevo Reglamento de Participación se aprueba por unanimidad
Por unanimidad, el pleno consumó ayer la aprobación inicial del Reglamento de Participación Ciudadana. El documento ha sido elaborado a partir de las aportaciones que hizo la ciudadanía en el marco del proceso participativo que se llevó a cabo dos años atrás. En su turno de palabra, el portavoz del PP, Sebastià Domènech, puso en valor el hecho de que, durante la elaboración del texto, «no se ha dejado de lado ningún partido». La concejala del PSC Carmina Pozuelo expuso las aportaciones de su grupo que han sido aceptadas y que pasan por rebajar el número de firmas necesarias para sacar adelante un proceso participativo y para realizar una audiencia pública, así como para introducir un punto en el orden del día del pleno o crear un órgano de participación, entre otros. La concejala de la CUP Mariona Quadrada enumeró algunas de las iniciativas impulsadas por su grupo anteriormente en este mismo ámbito.
El PP vota contra el Plan LGTBI+
El pleno también aprobó el nuevo Plan LGTBI+. La concejala de Participación, Montserrat Flores, explicó que «el nuevo plan se basa en el convencimiento de que se tiene que trabajar la igualdad». El grupo del PP votó en contra porque «el texto es muy ideológico».
Partida de 150.000 euros para hacer la ampliación del Centro de Lectura
Una modificación de crédito que reserva 150.000 euros para colaborar en la financiación de las obras de ampliación del Centro de Lectura quedó aprobada ayer con el voto en contra del grupo municipal de Cs y la abstención de la CUP. En su intervención, el portavoz de Cs lamentó que esta modificación se presentara en bloque con otra de dirigida en la Boca de la Mina y una para el Bartrina y recordó que el Centro de Lectura es una entidad privada y que la primera voluntad de ampliar el edificio viene del 2011 pero no se ha hecho. En detalle, el expediente va dirigido a la primera fase del proyecto. Ayuntamiento y Centro de Lectura «formalizarán próximamente el acuerdo y el compromiso de la entidad que los nuevos espacios que se proyectan con la ampliación acojan actividades culturales, artísticas y también divulgativas abiertas al conjunto de la ciudadanía». El proyecto encaja con el Plan Especial de Reforma Interior del Casco Antiguo, la actuación urbanística de remodelación del entorno del Teatro Bartrina y de los inmuebles donde está ubicado el Centro de Lectura; y abarca los inmuebles correspondientes a los números 6-8-10 y 12 de la calle de la Purísima Concepció y a los bajos del número 4 de la misma calle. Se ejecutará en varias fases.
Los Jardines de Infancia Municipales no obligarán a vacunar a los niños
La red de Jardines de Infancia Municipales de Reus no exige como condición indispensable por la matriculación de los niños que estos tengan al día la cartilla de vacunación. El grupo municipal de Cs llevó al pleno, ayer, una moción donde pedía que el Ayuntamiento obligue a los padres a cumplir el calendario de vacunación para sus hijos si quieren que puedan acudir a alguno de los seis centros que forman esta red. El portavoz de la formación, Juan Carlos Sánchez, apuntaba que «en ningún caso se trata de forzar a los padres en nada» sino de «garantizar la seguridad de los menores al máximo posible». Este curso, según los datos aportados por el mismo Sánchez, han sido dos los niños que se han matriculado en un jardín de infancia de la red municipal sin vacunar, todo y que uno de ellos sí que recibió vacunas más tarde. El global de niños en los jardines de infancia es de 473. Cs admitió, en su moción, una enmienda formulada por el PSC y que planteaba «una excepción para los niños que, por causas médicas certificadas por un pediatra, no hayan podido ser vacunados». La CUP había pedido a Cs que retirara la moción, cosa que Cs decidió no hacer finalmente, y los cupaires se abstuvieron en la votación. Sólo el grupo proponiendo dio apoyo a la moción.
Luz verde en la redacción del proyecto de un Consejo de la Vivienda
También por unanimidad, el pleno aprobó una moción de la CUP relacionada con la creación de un Consejo Municipal de la Vivienda. En detalle, y con las enmiendas aceptadas, el compromiso que se ha tomado prevé «redactar antes de final de mandato un proyecto de Consejo Municipal de la Vivienda», que tendrá como objetivo «debatir y generar opinión y propuestas en relación en la vivienda». La composición del Consejo «tiene que permitir dar voz al abanico más amplio posible de actores públicos y privados que estén relacionados con la propiedad, el acceso y el uso de viviendas de la ciudad por parte de personas de diferentes edades, géneros y situaciones laborales», tal como detalla el redactado de la moción.
«No» en|a la auditoría de la basura|maleza
Lo que no prosperó fue otra iniciativa del grupo que pedía que se realizara una auditoría sobre los primeros cuatro meses de prórroga del servicio de recogida de la basura y limpieza viaria, en manos de FCC. La CUP también reclamaba que la auditoría que el Ayuntamiento sacó adelante antes de la prórroga abarque igualmente los cuatro años anteriores. El concejal de Recursos Generales, Joaquim Enrech, valoró que «no haremos un rosario de auditorías».