La CUP denuncia «falta de ética» en la contratación de dos cargos de confianza de alcaldía en Reus
La formación pregunta por que se incorporan a tres meses de las elecciones «cuando el trabajo en el Ayuntamiento baja» y pide el detalle de sus horarios y tareas
La CUP ha pedido públicamente al gobierno de Reus una relación de horarios y tareas concretas que realizan los asesores del alcalde, Carles Pellicer. El grupo municipal denuncia «falta de ética» en la contratación reciente de dos nuevos trabajadores, uno de los cuales como asesor, que accedió a su lugar de trabajo en septiembre, y el otro como director de comunicación del Ayuntamiento, validado por el pleno de enero y en el cual este febrero se le ha aprobado una dedicación del 60%. «Sospecha», además, de la figura de jefe de gabinete de alcaldía, Marc Just, sobre la cual la formación anticapitalista apunta que «el día de la presentación de la campaña de Pellicer –de la cual Just es, también, director– dijo que podía compatibilizar los dos trabajos y que era muy consciente de la línea que tenía que marcar. Esta línea, sin embargo, ahora no vemos dónde está», en palabras de la portavoz de la CUP, Marta Llorens. Aunque «somos conscientes de que son actuaciones que jurídicamente no son delito», sí que «denotan una falta de ética» porque, a tres meses de las elecciones, «el alcalde no sólo es alcalde sino que es un candidato más», añade Llorens.
El grupo cupaire, que ha convocado los medios de comunicación esta mañana para dar a conocer su punto de vista, con la presencia también de los concejales Edgar Fernàndez y Mariona Quadrada, valora que «en este periodo, el trabajo bajo y se nos hace extraño que –en el gobierno– necesiten refuerzos». Las plazas a que inicialmente hace referencia se corresponden con dos vacantes que se produjeron a en septiembre del 2018 y el verano del 2017. Una de ellas se cubrió tres semanas después de que la persona que lo ocupaba se desvinculara y la otra, este pasado mes de enero. En general, las plazas de asesor, que están contempladas y controladas y de las cuales el gobierno puede disponer, se mantienen permanentemente cubiertas y hacerlo es plenamente legal. Llorens ha puntualizado, de hecho, que «no lo denunciaremos porque no es un delito». En total, y a pesar de todo, los cupaires ponen bajo el foco, a más de, Just, Ima Mis, Josep Escaño, Jaume Vendrell, Màrius Pàmies y Ricard Font de Rubinat. Aseguran que la situación de todos ellos es completamente regular, y también las recientes incorporaciones de Mis y Escaño, que «no son jurídicamente ni legalmente ningún delito», pero critican que los movimientos hayan tenido lugar en el periodo previo a las elecciones y piden «transparencia y saber qué hacen».