Judicial
Se enfrenta a cuatro años de prisión por robar móviles en habitaciones del hospital de Reus
La mujer ingresa en la prisión por haber roto una orden de alejamiento del centro sanitario antes de hacerse el juicio
Una mujer de 31 años se enfrenta a cuatro años de prisión para robar teléfonos móviles de dos habitaciones del Hospital Sant Joan de Reus. Los hechos pasaron el 2 de noviembre del 2018. La procesada, con antecedentes por hechos similares, entró al edificio por la puerta de Urgencias y accedió a las plantas de hospitalización. La ladrona aprovechaba que los pacientes dormían para revolver las estancias y llevarse algún objeto de valor. Después de ser identificada, un juzgado le impuso una medida cautelar de prohibición de acudir al centro sanitario. Antes de que se hiciera el juicio, sin embargo, la mujer lo incumplió y el 17 de enero pasado se acordó su prisión provisional comunicada y sin fianza.
Según relata la fiscalía, hacia las cuatro y media de la madrugada del 2 de noviembre del 2018, la mujer entró en una habitación donde había una paciente con movilidad reducida -con diez costillas y dos vértebras fracturadas- y empezó a revolver los cajones de la mesilla y el mobiliario de la habitación. La paciente se despertó y, entonces, la acusada vio que tenía varios aparatos de telefonía móvil bajo las sábanas. Empezó a forcejear con ella y la cogió de los brazos, hasta que se pudo apropiar de dos teléfonos -valorados en 400 y 95 euros, respectivamente.
Acto seguido, la ladrona se dirigió a otra habitación, donde también había ingresado a una mujer. Tanto la paciente como su hija, que la acompañaba, estaban dormidas. Aprovechando esta situación, la procesada se apropió de un teléfono -valorado en poco más de 100 euros- que la hija había dejado encima de la mesilla de la habitación.
La mujer ya fue condenada anteriormente a un año y dos meses de prisión por un juzgado de lo penal de Lérida por un robo con fuerza similar. A mediados de diciembre del 2017, la Audiencia de Lérida ratificó la condena en apelación y la dejó suspendida por un periodo de dos años.
La fiscalía pide a la mujer cuatro años de prisión por un delito de robo con violencia e intimidación y una multa de 630 euros por un delito leve de hurto, además que indemnice a las víctimas con el importe de los teléfonos robados. El ministerio fiscal aplica a la procesada el agravante de reincidencia y el atenuante analógico de dependencia crónica en el cannabis, la cocaína y la heroína. El juicio se hará próximamente a los juzgados de lo penal de Reus.