Comercio
El Pallol quiere captar un supermercado que dinamice la planta baja
Media docena de locales, más del 50% de esta parte del paseo comercial, acumulan al menos un año cerrados y sin acoger ningún negocio
Más del 50% de la planta baja del paseo comercial El Pallol está vacía. Al menos seis de los locales mantienen la persiana bajada y el último en cesar la actividad lo hizo hace un año atrás. Entre estos está la superficie que quedó desocupada ahora hace una década, en 2009, con el adiós de Supercor. Desde la Associació de Comerciants d'El Pallol son conscientes de la situación y valoran que «sería ideal que se instalara, de nuevo, un supermercado» que «completara la oferta de productos del resto de tiendas». Fuentes de Núñez y Navarro, la empresa gestora de El Pallol, aseguran que «un supermercado encajaría perfectamente dentro de nuestra estrategia». No confirman que se esté negociando con algún operador en este sentido, aunque la opción podría ser, como mínimo, una de las que están abiertas.
Los locales que en estos momentos están vacantes acogieron, recientemente, desde comercios de ropa y material deportivo hasta un establecimiento de tratamientos de belleza y cosmética, una taberna o un punto de venta de telefonía móvil. Pau Salvadó, presidente de la Associació de Comerciants d'El Pallol, Pau Salvadó, explica que son espacios que «tienen una muy buena ubicación, en pleno centro de la ciudad, y disponen de aparcamiento». Por eso, apunta, «pienso que nos encontramos en un momento de punto muerto y que muy pronto se volverán a poner negocios. Una vez haya abierto uno, el resto lo seguirán». El precio de los alquileres, apunta, «se ajusta al mercado, y no es más elevado que en otros sitios próximos».
Espacios de restauración
En la planta baja de El Pallol ofrecen actividad ahora la juguetería Somnis, Muebles Boom –que llegó el verano de 2018 y ocupa una buena cantidad de metros– y también varios bares y restaurantes, uno de los cuales se encuentra en obras. No es una posibilidad, al menos ahora, que los espacios vacíos se destine a bares, ya que no cuentan con la salida de humo necesaria para poder ubicar un servicio de cocina.
Lo que desde la Associació de Comerciants d'El Pallol querrían que se pusiera es, de cualquier manera, un supermercado. «Seguro que algún operador se interesa por esta zona y aquí hay los metros adecuados y el parking», valora Salvadó, que recuerda que «es un entorno donde hay poca oferta y probablemente algún operador lo acabe viendo así y se anime a venir». Aún así, recuerda, «eso se lleva siempre con mucha discreción y, si acaba pasando, incluso nosotros mismos lo sabremos una vez esté totalmente atado. Y si tiene que ser así para que sea exitoso, adelante».
Sobre los factores que han llevado al cierre de locales, Salvadó precisa que «probablemente no les salieron los números» y dice que «la economía familiar no se está recuperando tanto como pueda parecer y, cuando se recupera, a menudo se priorizan otras cosas diferentes a las que se podían priorizar antes». Los que todavía están, «hemos tenido la suerte de que tenemos la estructura y la clientela que nos han permitido mantenernos y continuar aquí».
En la planta superior de El Pallol, la situación es diferente. A pesar de que sí que ha habido baile de marcas, casi sólo dos de los espacios, el que da directamente a la plaza de la Sang, está vacío a estas alturas. A pie de calle, «la ocupación sí que es casi del 100%», añade Salvadó, que confía en que el mismo escenario pueda darse pronto en la planta baja.