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La apertura de la residencia de Horts de Miró de Reus queda pendiente de un convenio
La Generalitat y el Ayuntamiento están realizando varias reuniones para encontrar un acuerdo que satisfaga ambas partes
La situación de la residencia de Horts de Miró parece que todavía no se desencalla para abrir definitivamente sus puertas. Durante el mes de junio la Generalitat y el Ayuntamiento se han reunido más de una vez para intentar encontrar un acuerdo que guste a ambas partes y que permita la apertura del equipamiento. Pero este acuerdo parece que todavía queda lejos.
La Generalitat detalla a Diari Més que ha enviado un nuevo convenio al Ayuntamiento, que surgió de una de las reuniones que mantuvieron a lo largo del mes de junio. Las mismas fuentes detallan que «para la apertura de la residencia sólo falta ultimar detalles». Estos detalles serían que el Ayuntamiento aprobara este nuevo convenio, aunque parece que eso no se producirá. Fuentes del consistorio reusense comparten que «no tenemos ningún acuerdo cerrado y continuaremos las conversaciones por intentar encontrar una fórmula que resulte satisfactoria por las dos partes».
Así pues, el Ayuntamiento y la Generalitat seguirán reuniéndose y trabajando conjuntamente para intentar encontrar este acuerdo que satisfaga a los dos. A fecha de hoy, ninguna de las dos partes implicadas en la negociación han declinado dar detalles de esta propuesta que no los acaba de poner de acuerdo. Uno de los temas que podrían aparecer en las negociaciones es el número de plazas públicas y privadas de las que tiene que disponer esta residencia.
Unos detalles que, una vez aclarados, tendrían que permitir la puesta en marcha de la residencia de Horts de Miró, la que podría no tardar a llegar, ya que ahora el Ayuntamiento de Reus ya tiene un gobierno formalizado y eso podría favorecer a la hora de encontrar un acuerdo positivo.
Sólo la primera planta
Cuando la residencia abra, pondrá a disposición de las personas mayores un total de 29 plazas, de las cuales, según las últimas informaciones, 24 serán públicas y 5 privadas. El edificio está distribuido en cinco plantas, en el sótano del edificio están ubicados los servicios generales como cocina, lavandería, almacén general, vestuarios de personal y salas de instalaciones. En la planta baja se encuentra el acceso principal de la residencia. En la segunda planta estará situado el comedor general, la sala de estar del centro y servicios específicos como son las salas de podología, peluquería, sala de gimnasio, sala de terapia ocupacional y vestuarios de los usuarios del centro de día. En las plantas tercera y cuarta, que son iguales, hay las habitaciones de los residentes, sala de estar y de baño asistido. Las 24 plazas estarán situadas en la tercera planta que dispone de 29 camas, 12 habitaciones dobles y 5 individuales.
La apertura de la residencia y del centro de día comportará la contratación de una veintena de profesionales de diferentes especialidades, tanto de atención directa, gericultors, trabajo social, educador social, terapeuta ocupacional, psicólogo, enfermería, fisioterapia, servicio médico; como también de atención indirecta, limpieza, lavandería, mantenimiento, portería y dirección.