Vía pública
Quejas en Mare Molas por las farolas en mal estado que podrían caerse
Según detalla Ramón Sánchez, el problema principal serían los orines de los perros que no se limpian
Algunos barrios de Reus hace años que lamentan la «dejadez» por parte del Ayuntamiento tanto por los temas de seguridad como por los de limpieza y el Mare Molas no es una excepción. El presidente de la Asociación de Personas Mayores de Reus y Baix Camp, Ramón Sánchez, denuncia a Diari Més el mal estado de algunas farolas de este lugar, ya que algunos de ellos «se podrían caer y generar un peligro».
Hace tiempo que por las calles del barrio Mare Molas hay varias farolas que tienen su base bastante dañada, una incidencia que se ha agravado con el último aguacero que afectó a la ciudad la semana pasada. La humedad provocó que se oxidara más la zona de la farola que toca en la calle, que «ya estaba muy mal por los orines de los perros», detalla Sánchez quién añade que «el 70 o 80% del problema es por las meadas de los animales que no se limpian como es debido».
El cierto es que las micciones de los animales son corrosivas y, por lo tanto, provocan daños en elementos metálicos como pueden ser las farolas. Es por|para eso, entre otros motivos de civismo, que el Ayuntamiento aconsejó a los propietarios de perros que, cuando los saquen a pasear, lleven una botella de agua para limpiar los orines de animales y así disolver la meada. El consistorio también avisó de que pondría multas aquellos que no cumplieran con este requisito pero para poder multar, el gobierno tiene que cambiar la normativa vigente. Para Ramón Sánchez, este aviso del Ayuntamiento no es suficiente, aunque se pudiera multar, y pide una «ley municipal más firme».
«Un día el Ayuntamiento tiene que limpiar a fondo todos los orines que pueda haber por la ciudad y, el día siguiente, aplicar una normativa que obligue a los propietarios a salir con una botella de, como mínimo, un litro de agua y una escoba» dice Sánchez, quien argumenta que «con las botellas pequeñas no es suficiente porque un perro levanta la pata muchas veces y es fácil que te quedes sin agua rápidamente». Con respecto a la escoba, explica que «sólo con el agua no es suficiente porque todavía queda un poco de pipí, por lo tanto, si también se barre un poco encima, ya queda limpio como antes» y añade que «con los excrementos haría lo mismo, aparte de recogerlos, también mojaría la zona y después lo barrería para que no quedara rastro».
Finalizando con el tema de los perros, Sánchez lamenta que «hay un parque muy cerca donde pueden hacer las necesidades pero no lo hacen porque ya han meado y defecado por la calle».
Una farola arrancada
Continuando con la inseguridad que generan las farolas en mal estado, Sánchez considera que «hace falta más vigilancia por parte del Ayuntamiento, para que ellos mismos vean en qué estado se encuentran los diferentes elementos de la vía pública por si se tienen que renovar o no».
El presidente de la Asociación de Personas Mayores de Reus y Baix Camp, cuyo lema es «por un bienestar social», comparte que «la semana pasada un vecino de la zona hizo una fotografía de una farola que estaba muy desgastado y la envió al ayuntamiento y este envió a las Brigadas Municipales para arrancarlo». Sánchez admite que «eso está muy bien, pero si estuvieran más pendientes de los barrios, no haría falta que un vecino les pasara fotografías, lo verían los trabajadores y estos podrían tomar las medidas que fueran necesarias».
Aunque la farola «más peligrosa» ya ha sido arrancada por las Brigadas Municipales, el barrio de Mare Molas sigue «sufriendo» para|por el mal estado del resto de puntos luminosos que tienen su base oxidada e, incluso, con algunos agujeros que ponen en riesgo su estabilidad y podrían provocar problemas más graves si acaban cayendo.