Reus Cultura estudia el uso de lonas ignífugas en las tiendas para los actos de fuego

Reus Cultura analiza «otro modelo con otro sistema de sujeción y más fácil de almacenar» para cubrir los escaparates de las tiendas del centro al paso del Ball de Diables, durante las fiestas. El Ayuntamiento había impulsado anteriormente «una primera prueba de producción de lonas ignífugas» pero «el resultado no convenció», hecho por el cual la cuestión ahora se está repensando.

Del primer modelo, según detallan fuentes municipales, se llegaron a producir lonas para tapar los escaparates de seis establecimientos. La financiación, tal como estaba previsto en aquel momento, era del 45% a cargo de Cultura, otro 45% que pagaría Reus Promoció y el 10% restante, a asumir por los comerciantes. Diables piden que la medida se aplique por el hecho de que «dignificaría el propio Ball de Diables, porque entonces podríamos tirar como Dios manda, dignificaría la Festa Major de Reus porque es una imagen mucho más bonita que los cartones que se utilizan ahora y, al final, las tiendas, no tendría que hacer más». Con respecto al coste económico, «ahora no sé cuánto será sin embargo, el 2010, que es cuando la Cabra hizo 30 años, por ejemplo, se gastaban unos 3.000 euros en colocar cartones para los actos de fuego», explica Roger de la Cruz, presidente del Ball de Diables de Reus.

Adaptarlas a los comercios

Esta «era una cuestión que siempre habíamos pensado y tratado con el IMAC, utilizar otro sistema en lugar de los cartones, que también se descuelgan, caen y generan problemas», añade, y dice que «las lonas se hacen una sola vez y se pueden adaptar a cada tienda, y durarían años», aunque el Ball de Diables «no nos ponemos en quién es quién lo tiene que pagar». De la Cruz lamenta que «aquí, la gente ve la Festa Major pero no la vive» y que «en el resto de fiestas mayores de primer nivel no es así». «Desde hace unos años salimos en la procesión. Se decidió dejar un tiempo de margen para que la gente se acostumbrara, yendo con surtidor. Han pasado los años pero seguimos con surtidor», apunta, y valora que «no estamos haciendo lo que nos es propio como todos los elementos sí que hacen. Pasamos por la calle Major varios días de junio, pero es que es la calle que va a la Prioral. Para Misericòrdia, hacemos el recorrido de Sant Joan pero al revés. Son siempre las mismas tiendas y, por eso, no hay excusa para ponerse con el tema de las lonas». «Queremos salir de una manera que dignifique el Ball de Diables que tiene la ciudad, tirando como lo hacen los diablos que es con carretilla y no con surtidor», concluye.

Comerciantes de la calle Major, a su vez, explican que «no estamos en contra de los Diables, ni de que pasen por aquí, y estamos a favor de la fiesta» pero que «los cristales de los comercios también se tienen que preservar de alguna manera efectiva para que con el fuego no queden marcas». Por eso, «hace unos años hubo un proyecto del Ayuntamiento para hacer las lonas y algunos establecimientos nos añadimos, pero la cosa quedó parada y las lonas no nos llegaron».