Movilidad
Reus Transport estudia instalar una parada de la L60 en la avenida de Salou
Las quejas de los vecinos de Mas Iglesies han hecho que la empresa municipal valore trasladar la marquesina de Maria Aurèlia Capmany, ahora fuera de uso
Reus Transport está estudiando trasladar la parada de bus de la Línea 60 de la calle Maria Aurèlia Capmany a la avenida de Salou, justo unos metros más abajo. Esta decisión se está valorando después de las modificaciones que afectaron a la L60 y que dejaron sin uso la parada de Maria Aurèlia Capmany, ya que ahora no pasa ninguna línea por esta calle, para dar así más servicio a la Biblioteca Pere Anguera y a la urbanización Mercader.
Esta modificación de la L60 entró en funcionamiento el pasado 9 de septiembre y las asociaciones de vecinos de Mas Iglesias no tardaron en mostrar su malestar. El presidente de la AVV El Roserar, Francesc Jornet, apuntaba a Diari Més que «estoy de acuerdo en que si el bus tiene que ir a la biblioteca, no pase por Maria Aurèlia Capmany, pero que desplacen la parada unos metros más abajo, a la avenida de Salou que por allí sí que pasa el nuevo recorrido». En la misma línea, el presidente de la AVV de Mas Iglesias, Jordi Balust, decía que «encuentro muy bien el reajuste que han hecho, para dar más servicios a zonas que hasta ahora no tenían el bus tan cerca, pero lo más normal era que desplazaran esta parada a la avenida de Salou».
Unas reivindicaciones que parece que fueron escuchadas por el consistorio y, especialmente, por el grupo municipal del PSC que decidió llevar estas quejas al plenario municipal celebrado el pasado viernes 20 de septiembre. «Los vecinos se quejan de que la eliminación de la parada de Capmany ha sido tomada unilateralmente por la empresa Reus Transport», detalló en el pleno Daniel Marcos, concejal del PSC. Es por eso que los socialistas pidieron al gobierno que «la empresa Reus Transport acuerde con las dos asociaciones de vecinos del barrio Mas Iglesias las modificaciones de la L60 a fin de que se adecuen a las necesidades de los vecinos y que la empresa notifique a las diferentes asociaciones de vecinos cualquier otro cambio de recorridos y paradas».
Buzoneo en el barrio
Marina Berasategui, concejala de Urbanismo y Movilidad, dijo que «la empresa tenía el encargo explícito de maximizar las líneas que ya tiene, y por eso llegamos a Mercader, hecho que imposibilita pasar por Maria Aurèlia Capmany» y añadió que «estamos trabajando la opción de hacer una plataforma de embarque en la avenida de Salou que, al ser una vía rápida, no es fácil y tiene unas implicaciones con la Guardia Urbana muy importantes». Con respecto a la comunicación de los cambios de la línea con los vecinos, un hecho que criticaron los mismos vecinos y el PSC, la concejala de Urbanismo y Movilidad manifestó que «hicimos un buzoneo de 3.500 unidades comunicando el cambio y la nueva accesibilidad de paradas tanto en Mas Iglesias como en el barrio Fortuny, además de la comunicación a través de la prensa».