Festivo
La FRAC aplaza el cambio de carrozas y quiere volver al disfraz tradicional
La Junta de Pere Turellols repetirá al frente del Carnaval después de que las elecciones cerraran sin ninguna candidatura más
La Federación Reusense de Asociaciones de Caranaval (FRAC) repetirá la misma Junta, presidida por Pere Turellols y con Marc Loran como secretario, después de que no se presentara ninguna candidatura más a las elecciones celebradas este 17 de octubre. A la Junta se ha incorporado, igualmente, un miembro de uno de los grupos jóvenes. La falta de propuestas propició que no se tuviera que realizar la votación. Si no hay ningún cambio a lo largo del periodo, el equipo de Turellols continuará al frente del Carnaval de Reus los próximos cuatro años.
De cara a la edición 2020, que se celebrará entre el 20 y el 26 de febrero y donde se espera la participación de «unas 9.000 personas», la FRAC tira adelante dos apuestas: por una parte, prorroga dos años más el plazo para adaptar las carrozas a una nueva normativa y, de la otra, quiere involucrar a los grupos en la «recuperación de los disfraces tradicionales» o en «el uso de disfraces que estén más elaboradas, en caso de que sean de las compradas de bolsa», tal como detalla Loran.
Unas 15 plataformas adaptadas
La primera decisión, la relacionada con las plataformas, se ha tomado al constatar que «de los cerca de 56 grupos que participan con carroza, sólo en torno a 15 lo habían cambiado». La previsión con que se trabajaba era que, este 2020, la totalidad de los vehículos se ajustaran a los requerimientos por circular también fuera del circuito donde se desarrolla el Carnaval. Las «modificaciones recientes en la normativa» y «el precio que supone un cambio de carroza, y que implica un esfuerzo importante por parte de los grupos», han llevado s la FRAC a ampliar «hasta el 2022 o el 2023» el margen para realizar las homologaciones, añade el secretario de la entidad.
La propuesta pasa por reemplazar los actuales vehículos por unidades de tractor más remolque o camiones de caja abierta –homologados, matriculados, con las inspecciones pertinentes y seguro– sobre los cuales se construirían los montajes temáticos. Las dimensiones tendrían que rondar los 8x2,5 metros. Con respecto a la música, se contempla que esté sólo orientada a la zona de atrás. La intención es «hacer un estudio para ver si algunas de las carrozas actuales, que se rigen por una normativa antigua, se pueden adaptar o si no hay más solución que el cambio». Desde la FRAC mantienen la convicción de que el cambio de plataformas tumbará las recomendaciones de la Guardia Urbana que impiden uno de los grandes objetivos de la entidad: que el desfile entre al Tomb de Ravals. Una cuestión, esta, que «supondría un salto importante al Carnaval».
Con respecto a los disfraces, y a la voluntad de la FRAC de recuperar las más tradicionales, confeccionadas específicamente para el Carnaval en detrimento de «las de bolsa» que se comercializan ya cosidos y a menudo a un precio más bajo, Loran es consciente de que «es complicado por el gasto económico y porque cada vez quedan menos modistas donde los grupos puedan hacer los pedidos». «Se puede salir con disfraz de bolsa, sí. Pero no con una que valga cinco euros, sino con una que tenga una calidad un poco decente, que también hay, muchos las hemos utilizado y son muy aceptables», añade, y dice que «últimamente hay muchos grupos que salen con el más económico». En la misma línea se expresa el secretario de la FRAC sobre la decoración de las carrozas, que «requiere poner horas y dedicación para hacer montajes y cosas que sean diferentes, mejor que ir cada año con pegatinas y el mismo aspecto».
La FRAC mantendrá las limitaciones que ya aplicó el año pasado relacionadas con el consumo de alcohol –autorización previa y acompañamiento de menores en el desfile y evitar el uso de la bebida como reclamo, entre otros– y quiere seguir promoviendo un ambiente «cívico» en la fiesta. Loran recuerda que «la implicación de la gente es muy importante» y por eso pide «que crezca», y celebra que, en los últimos tiempos, «la entidad se ha abierto mucho». Actividades dirigidas a públicos específicos, como la que «lleva el Carnaval a las escuelas» están teniendo «una gran aceptación entre los centros y los niños y eso nos hace muy contentos».