Energía
Mover el transformador «evita muchos problemas» en el barrio Immaculada
La AVV celebra la entrada de la maquinaria, esta semana, y el inicio de un proyecto que todos esperábamos
La maquinaria ha entrado esta semana a trabajar en el traslado del transformador del barrio Immaculada, que ya había vivido la semana pasada los trabajos preliminares para empezar a retirar la instalación del cruce entre la calle de Immaculada y el paseo de l'Oliver. La presidenta de la Associació de Veïns del barrio Immaculada, Esperanza Torrijos, expresaba ayer que «todos esperábamos las obras desde hacía mucho tiempo y ya casi pensábamos que no llegarían».
«Estamos muy contentos porque, en principio, con el traslado ya no habrá más problemas», añadía Torrijos, que recordaba que la estación eléctrica «estaba en parte dentro de una casa y se le había ido añadiendo, con el paso del tiempo, el suministro de todas las nuevas viviendas, que son bastantes». En el interior del inmueble adyacente al transformador, si se colocaban cerca de la instalación, «los inquilinos no tenían internet y tampoco podían utilizar el móvil». «Aparte de eso», precisaba la presidenta de la AVV Immaculada, «en aquel punto se habían producido muchos accidentes de tráfico y los coches iban siempre a parar al transformador. Por eso, en la casa de al lado tenían miedo de que cualquier día hubiera afectación a la electricidad y pasara alguna cosa».
Las esperadas obras «no nos están generando ningún inconveniente porque únicamente cortan un tramo de la plaza del Racó de l'Avi, pero los vecinos tenemos acceso por todos los lados». «Las máquinas ya están en el sitio y han estado trabajando», añade Torrijos, que precisa que el «martes sí que no tocaron nada porque llovía mucho pero hoy –ayer para el lector– ya han estado aquí y hacen el trabajo».
El Ayuntamiento adjudicó en abril, por un importe de 146.399 euros IVA incluido, el traslado del transformador del barrio Immaculada. El proyecto, que había resultado aprobado en el marco de los Presupuestos participativos 2018, prevé mover la estación transformadora, ahora situada en el cruce entre la calle de Immaculada y el paseo de l'Oliver, unos 30 metros hacia el este, hasta la plaza del Racó de l'Avi, concretamente en la esquina que forman la calle de Immaculada y la calle de la Església.
Valla y filtros en el recinto
En el marco de todo, se colocará una valla que sirva para disminuir el impacto visual de la nueva posición del transformador y para organizar el acceso en la plaza del Racó de l'Avi, un espacio público dedicado a zona de juegos infantiles. La estructura estará formada por tubos metálicos. El espacio actual del transformador se derribará y se completará el hueco que esta operación deje en la valla. La nueva valla rodeará el transformador y tendrá dos laterales en contacto con la zona de juegos infantiles. De esta manera se generará un segundo filtro entre el recinto de la estación transformadora y la plaza: por una parte, el volumen de las pérgolas, las cuales definen una especie de vestíbulo de entrada que forma una transición entre las aceras exteriores; y, de la otra, el interior del recinto destinado al ocio infantil, según queda reflejado a la documentación que tiene que guiar los trabajos. La obra, que ya activó los primeros movimientos la semana pasada, se alargará tres meses.