El parking subterráneo del Sant Joan, saturado por las obras del de tierra

Encontrar una plaza de aparcamiento en el Hospital Sant Joan de Reus en hora punta obliga los conductores, desde hace unos días, a afinar la vista y cargarse de paciencia. El parking subterráneo del centro sanitario ha empezado a registrar el pleno de sus dos plantas, al menos en algunas franjas de más afluencia, desde que el Ayuntamiento cerrara el solar exterior donde se estacionaba descontroladamente para ejecutar las obras que lo convertirán en zona azul. La saturación, visible en la luz roja de los indicadores de plazas disponibles, deriva igualmente en colas en el acceso, ubicado ahora pasada la rotonda en dirección al Tecnoparc.

Al principio del mes de julio, Reus Mobilitat i Serveis incorporó el parking del Sant Joan, que dispone de 650 plazas, a su red, y aplicó una tarifa de 4 euros máximo al día. El paso en manos municipales –hasta entonces el aparcamiento lo gestionaba directamente Iridium- implicó, también, la renovación de los cajeros de pago y su recolocación al lado de los ascensores que dan paso a las plantas del Hospital. El nuevo dibujo genera colas, a pesar de que de otro tipo: las personas que se esperan para pagar obstaculizan la entrada y la salida de los ascensores y se acaba generando colapso en lo que son zonas de paso.

La acumulación de vehículos, con todo, no se mujer sólo en el subterráneo. Desde el inicio de la intervención en la zona azul, las cunetas de la avenida de la Universidad se encuentran llenas de coches que, a veces, no permiten la circulación en doble sentido.

Prueba piloto en bus

Fuentes municipales precisan que «la obra en el aparcamiento de superficie está para mejorar la movilidad en la zona» y que «avanza según los plazos previstos», y apuntan que «los precios del aparcamiento subterráneo son muy competitivos, como así lo demuestra el uso por parte de los usuarios». Reus Transport, por otra parte, pone en marcha hoy y hasta el día 10 de noviembre una prueba piloto para promover el uso del transporte público en los desplazamientos al Hospital. Por eso, se repartirán hasta 5.000 billetes entre los usuarios del centro sanitario que permitirán viajar gratuitamente a las líneas 20 y 60, las cuales conectan la ciudad con el equipamiento de la avenida Joan Laporte.

Un nuevo paso cebra

Con la cuestión del aparcamiento tiene que ver, también, la práctica con saltar la medianera de Bellissens que utilizan usuarios del Hospital cuando aparcan en el Tecnoparc, para ahorrarse unos metros hasta el paso de peatones. Construir otra rotonda es una condición necesaria, según el planteamiento del gobierno local, para poder ubicar un nuevo semáforo con paso cebra que ponga fin a estas peligrosas escenas.