«En esta época inquietante el arte y la literatura tienen más sentido que nunca»

—A la nota preliminar del libro nos advierte que el título, Bombes de llavors, es un oxímoron. ¿Qué se esconde, detrás de esta elección?

—La palabra bomba nos remite a destrucción, y la palabra entonces en el tesoro de la vida latente. La combinación de las dos palabras es una expresión explosiva a favor de la esperanza activa, tanto individual como colectiva. En esta época inquietante de vulneración de derechos y de represión, el arte y la literatura tienen más sentido que nunca porque nos suscitan preguntas.

—Qué paralelismo establece con las bombas de semillas reales, que se utilizan para la repoblación agrícola?

—Las Bombes de llavors son una iniciativa para recuperar espacios urbanos degradados. Consiste en tirar bolas de barro seco con una semilla dentro. Son armas pacíficas que tomamos como referente metafórico: el estallido de Bombes de llavors invita a descubrir potencialidades, a crear horizontes.

—Cómo se gestó, este libro?

—En los tres últimos años he ido escribiendo las veinte prosas poéticas inspiradas en pinturas, collages y fotografías, y las he ido publicando en mis espacios web. Cuando dije a los artistas que quería reunirlas en una publicación digital, todos se sumaron para hacerlo posible. La poeta a Mònica de Dalmau hizo el prólogo y el epílogo; Fina Veciana, la cubierta y un mosaico-epílogo.

—Qué artistas intervienen, y por qué los ha escogido?

—De hecho, tengo la impresión que las obras me han escogido a mí. Veinte obras de arte llenas de preguntas que no me han dejado de tranquila hasta que las he formulado con palabras. Pertenecen a ocho artistas de Reus o vinculados a la ciudad: Carme Andrade, Teresa Llorach, Josep Lomas, Sara Mauri, Marc Pérez Oliván, Cesca Toledano, Fina Veciana y Rosa Virgili. Me gusta la mirada que proyectan sobre el mundo. En la fase de preparación de la presentación con acciones artísticas, se han incorporado las performers Laia Espallargas y la niña Martina Rius Mauri; las rapsodas Antònia Farré y Alba Closa, y la música Cristina Duran. Tienen en común el talento y la generosidad creativa.

—Fina Veciana tiene una presencia destacada. Hábleme de su conexión artística.

—Sus pinturas me sugieren realidades, me inspiran. Para mí, trabajar codo con codo con la Fina es una fiesta. En Bombes de llavors, además de las aportaciones como autora, se encarga de la dirección escénica de la performance de presentación.

—Usted es impulsora de varios trabajos como este, de creación colectiva. ¿Qué es lo que lo atrae de estos tipos de proyectos?

—Disfruto mucho en el proceso de creación colectiva, ver cómo otros creadores se hacen suyo un proyecto y van surgiendo sinergias. Hacer el recorrido creativo con tanto talento y belleza es la aventura de que ha dado sentido a los cinco proyectos artisticoliteraris que he impulsado hasta hoy con otros creadores.

—El libro Bombes de llavors se ha editado únicamente en formato digital?

—Sí, en soporte digital, hoy por hoy [https://bit.ly/2XDsSUG]. Lo he hecho así porque tenemos la tecnología al alcance para publicar, el libro ensoporte digital tiene visibilidad y se accede sin coste. Los coautores tampoco sacamos rendimiento económico, cosa que, lo bastante bien lo sabemos, lo iguala en la edición en soporte tradicional.

—Este jueves por la noche se presentará el libro a Cal Massó, con lo que señalan será una Performance artisticoliterària. ¿Qué nos tienen preparado?

—Tenemos preparada una presentación no convencional, que consistirá en hacer del libro digital una translación visual y oral al espacio real del Centro de Arte Cal Massó. Las Bombes de llavors estallarán con la fuerza de las voces y de los cuerpos, los subrayados musicales, las imágenes proyectadas, los tatuajes efímeros... Un despliegue multidisciplinar,