El gobierno de Reus prevé la construcción de la piscina municipal pública en el 2023

El alcalde Carles Pellicer anunció ayer que durante este mes se iniciará el periodo de consultas previas para que la piscina municipal pública sea una realidad en el 2023. Ya hay fecha pues, para estas instalaciones que se ubicarán junto al Pabellón Olímpico. El complejo ofrecerá también gimnasio y diferentes servicios del ámbito deportivo. Pellicer explicó que habrá un periodo de 3 meses para recoger propuestas, mecanismo que prevé la ley de contratos de servicio público para sondear el mercado sobre determinadas cuestiones y recoger propuestas.

El alcalde aseguró que «la ciudadanía y también las empresas pueden ver cómo se pueden desarrollar estas piscinas» y que después, enseguida se irá a la fase de licitación porque «quiero que esté acabada antes del 2023». También añadía que aunque ya se está ultimando detalles, los próximos días su equipo dará a conocer más detalles del proceso de las nuevas infraestructuras. Pellicer especificó que «será una piscina que podrá utilizar a todo el mundo, pero no será una piscina de competición». Un proyecto que, como reconoció, la ciudadanía demanda y que, de hecho, es una petición del Mapa de instalaciones Deportivas del Municipio (MIEM). Se ubicará en la zona sur, tocando el Pabellón Olímpico Municipal donde hay un solar municipal que permite la instalación del complejo. El alcalde afirmaba que «habrá piscina sí o sí» y que, «cuando esté acabada, lo agradeceremos todos». Precisamente, la portavoz de la CUP, Marta Llorens, hacía referencia a estas instalaciones al pleno extraordinario del miércoles, donde pedía empezar ya por «una buena propuesta de piscinas municipales publicas».

El RavalS. Anna para peatones

En el tradicional desayuno de Navidad con los medios, el alcalde también manifestó la voluntad de convertir el Raval Santa Anna en zona de peatones definitiva, mediante la obra para dejarlo a un mismo nivel que la acera. Esta será una realidad el año que viene, ya que según afirmó Pellicer, el Raval Santa Anna funciona y, «es una propuesta electoral que se ha hecho realidad». Aunque todavía está en fase de prueba piloto hasta el 29 de febrero, cuándo finalice, se planteará como se ejecutan las fases definitivas y así «avanzar hacia una ciudad más sostenible». El alcalde añadía que «se trata de una primera prueba para empezar a pensar en el futuro». El objetivo es conseguir un centro más «joven y europeo», ya que, comoaseguraba, «es la manera de regenerar el centro y, si regeneramos el centro, regeneramos la ciudad». Decía que se conseguirá «reconvirtiendo lo que tenemos en espacios nuevos, más modernos» incrementando la comodidad, el paseo y la sostenibilidad.