Movilidad
Año y medio de retraso en la implantación de datáfonos en los autobuses urbanos de Reus
El pago del billete con tarjeta bancaria tenía que estrenarse en 2018 pero Reus Transport está revisando cuestiones técnicas
El sistema que tiene que permitir a los pasajeros pagar el billete de autobús urbano con tarjeta de crédito o débito, el cual Reus Transportanunció que pondría en marcha en septiembre del 2018, acumula cerca de un año y medio de demora. Fuentes municipales consultadas concretan a Diari Més que «el proyecto no se ha abandonado en ningún caso» y que «se sigue trabajando para implantarlo» aunque «cuestiones técnicas» todavía para resolver no habrían hecho posible, como mínimo hasta el momento, su activación.
La voluntad de añadir esta a la otra modalidad de pago ya existente para el billete sencillo –que es el metálico– surgió a raíz dela instalación del wifi a bordo en la flota de vehículos, el WifiBus, que hace que los usuarios puedan navegar por internet de manera libre y gratuita durante el trayecto. Los vehículos adquiridos este verano ya lo llevaban de serie. Precisamente la conexión abría la puerta a colocar datáfonos y, por lo tanto, utilizar la tarjeta bancaria para coger el bus. Al iniciar las pruebas para desplegar el necesario mecanismo, sin embargo, la empresa municipal comprobó que el uso del datáfono representaba «unos 20 segundos por viajero,» tiempo excesivo para garantizar la puntualidad de las rutas tal como ahora están concebidas. Desde entonces, por lo tanto, se ha estado trabajando para tratar de rebajar esta cifra. Y es eso lo que estaría motivando, según las mismas fuentes, el retraso que se alarga ya un año y cuatro meses. El escollo, que ya se apuntó en el mismo momento de hacer pública la primera fecha para la puesta en funcionamiento del pago con tarjeta de crédito o débito, está resultando más complicado de salvar de lo que en aquel momento se previó.
Llevar el importe exacto
Desde inicios de este año 2020,el billete sencillo ha pasado de costar 1,25 euros a fijar el precio en 1,30 euros y es lo único que se puede adquirir directamente en los buses, dado que los abonos se compran en las oficinas de Reus Transport o bien a estancos y quioscos distribuidos a la ciudad. Ahora sólo hay una opción para el pago de este billete sencillo: dinero en metálico. A través del sitio web de la empresa se especifica, en este sentido, que «para agilizar el servicio, es aconsejable llevar el importe exacto».
En los últimos meses, varias líneas de bus|buzo han vivido cambios: la L20 y la L21 han ganado dos paradas en la avenida de Sant Bernat Calbó; la L11 ha incorporado otra a Vidal i Barraquer; y la L60, que suprimió la parada Maria Aurèlia Campany, lo ha recuperado ahora, tal como adelantó este rotativo, ubicada en la avenida de Salou. Igualmente, coincidiendo con las obras de la nueva área azul en el Hospital Sant Joan, Reus Transport realizó una prueba piloto de transporte gratuito en el centro sanitario que ha dejado un balance «positivo» por el hecho que «ha ayudado a difundir el uso del autobús», todo y que no repertcutirà en ninguna novedad en las rutas.