Medio ambiente
Immaculada quiere ser barrio de Reus piloto en el uso del pipican que premia los perros
El AVV registra una petición en el Ayuntamiento para obtener un ‘E-Can’, un tótem que atrae los animales para que orinen y entrega galletas
La Asociación de Vecinos del barrio Immaculada ha registrado, este diciembre, una petición en el Ayuntamiento donde pide convertirse en «barrio piloto» para el despliegue en Reus de un innovador sistema de pipican, llamadoE-Can , que atrae los perros para que orinen y premia su comportamiento «cívico» con una galleta.
La presidenta de la entidad, Esperanza Torrijos, detalla que «en la zona, como no los hemos pedido nunca, no tenemos ahora pipi-canes de ningún tipo» y que «el sistema que se utiliza más habitualmente, que está basado en espacios del suelo con una valla, tampoco nos parece del todo positivo porque requeriría que esta tierra donde se acumulan los orines fuera totalmente renovada regularmente, cosa que al final no pasa». Por eso, y después de constatar la necesidad de disponer de al menos un pipican, «pensamos en alguna cosa innovadora y hemos visto que elE-Can , que ya se ha puesto en marcha en poblaciones próximas, puede cumplir con el doble objetivo de crear espacios donde las mascotas puedan miccionar y a la vez que estos mismos espacios se mantengan limpios». La idea es «que se coloque uno, primero, en alguna de las plazas o los parques del barrio y, si resulta que la experiencia ha sido positiva, pasado un tiempo, más aparatos puedan implantarse también en el centro y en toda la ciudad, de manera que sea posible encontrar más de uno a lo largo del camino durante el paseo con el perro y que se pueda parar», añade Torrijos.
Rutinas de los dueños
El mecanismo delE-Can , que quiere ser un «urinario adiestrador», se concreta en un «tótem autónomo, auto-lavable, autodesinfectante y ecológico». Para utilizarlo, «el perro se coloca encima de la reja del urinario y, después de que haya hecho sus necesidades, el aparato da a su dueño la oportunidad de premiarlo con una golosina» que el mismo tótem dispensa. Este hecho «creará un hábito en el animal y ayudará a mantener limpias nuestras ciudades» y «tres veces al día, unos aspersores desinfectan la base y la rejilla delE-Can ». Fuentes de la fabricante consultadas explican que el sistema «no quiere sustituir en ningún caso los espacios de recreo para perros sino las farolas, los bancos o las esquinas de los edificios» y que «se ha previsto un margen de tiempo entre cada galleta que se dispensa que prevenir un mal uso. Aunque al principio el premio caía automáticamente, vimos que era importante implicar a las personas». También «se ha desarrollado una aplicación para Android que realiza un tipo de check-in encada E-Can y muestra a los usuarios, a través de gps, donde está el próximo tótem. Cada vez que se utiliza elE-Can se acumulan niveles y, cuando se ha alcanzado la costumbre de ir, al dueño le llega un correo de felicitación». De esta forma «los ayuntamientos pueden tener también constancia de los usos y distinguir a los dueños más cívicos para ofrecerles, si quieren, ventajas». Molins de Rei o Sant Boi ya han iniciado el despliegue de estos pipi-canes. El pipican funciona con energía solar y «de manera muy similar a uno inodoro seco». Cada máquina tiene un precio aproximado de 1.500 euros y la empresa trabaja en una nueva serie de ellas que estarán hechas reaprovechando antiguos parquímetros.
Remojar las micciones
Los vecinos ven que el sistema «encaja en la nueva normativa que pide a la ciudadanía que remoje los orines de su perro. De hecho, remojarlos es también lo que hace la máquina». La presidenta del AVV del barrio Immaculada valora que «es muy importante que no genere olores y puede animar a la gente el hecho de que sea una cosa tecnológica. Seguro que todo el mundo que pase al lado y vea el aparato se acerca a probarlo y quizás optar por usarlo de manera regular». En el barrio «hay muchos perros, tanto de los mismos vecinos como también otras personas que aprovechan para traerlos aquí a pasear, así que sería un buen lugar dónde hacer esta prueba», la cual «habríamos pedido a través de los presupuestos participativos si se hubieran hecho este año».