El Cafè de Reus reabrirá en marzo después de más de un año sin actividad

El Cafè de Reus volverá a acoger actividad después de más de un año sin hacerlo. Factoria DisbaratSL, una alianza formada por Indaleci Salas y David Soley, ha alquilado este local de propiedad municipal ubicado en los bajos de la calle Metge Fortuny. La intención, tal como explica Soley aDiariMés, es «abrir lo más prontoposible, probablemente a mediados de marzo». Lo que se pondrá en marcha es «un proyecto vital, surgido de la amistad que compartimos desde los cinco años» y quiere ser «humilde pero muy auténtico y dar un peso importante a la música. Nuestros referentes son Barcelona, Amsterdam o Bruselas».

Inicialmente, el renovado Cafè de Reus tendrá forma de «bar y cafetería» y «más adelante queremos ir introduciendo, poco a poco, el tema de la gastronomía». Soley explica que «aunque somos nuevos en la plaza, queremos hacer destino de Reus» y destaca el valor de un espacio que, aunque en los últimos tiempos ha pasado por varias manos sin acabar de arrancar, «se encuentra en un sitio muy privilegiado y es conocido por todo el mundo». Soley, que es arquitecto de profesión y gestiona algunas empresas de su ámbito, se une a la experiencia que acumula Salas en el sector del ocio y hotelero vinculado al GrupPalas, para «empezar esta aventura con una gran ilusión y con el propósito de hacer las cosas bien hechas y poco a poco».

Mantendrán el nombre y la terraza

«Tenemos proyectos mayores, queremos ir ampliando el destino, hacer cosas en la ciudad, pero de momento empezamos por aquí», añade, y dice que «las líneas maestras de la idea las iremos desvelando más adelante, poco a poco. Apostamos por Reus y queremos ir paso a paso».

Lo que sí que está claro ya ahora es que el nombre de Cafè de Reus se mantendrá. También el espacio de terraza que siempre ha tenido el local en el Mercadal, que se abrirá igualmente. La vuelta del local a la actividad obligará a redistribuir, pues, el mapa del Mercadal, donde habían quedado vacantes el puestodel mismo Cafè de Reus y lo está todavía elque ocupaba el restaurante del Gaudí Centre, que el 6 de enero alcanzó un año cerrado aunque ha recibido diferentes intereses de empresarios.

Todas las cuestiones económicas que habían quedado pendientes con el anterior inquilino, a quien el pleno del Ayuntamiento le concedió un periodo de carencia en el pago del alquiler a cambio que realizara obras de mejora en el local para evitar que el espacio perdiera la capacidad de acoger un bar o restaurando, habrían quedado plenamente resueltas a través de este traspaso, el contrato por lo quese rubricó de forma definitiva el miércoles.

Soley valora que «el Cafè de Reus tiene mucha solera, es histórico y plantea muchas opciones. Es un local auténtico. Nosotros lo que buscábamos es autenticidad y yo creo mucho en eso. Así que pienso que, si lo hacemos bien, la gente vendrá». En relación al público al que se dirigirá el negocio, dice que «obviamente estará abierto a todo el mundo pero se enfocará quizás también un poco a gente como nosotros: jóvenes, profesionales, a quien les guste la música y las cosas bien hechas».