Un grupo de deportistas correrá 600 km para conseguir 9 toneladas de comida

Un grupo de 17 deportistas procedentes de diferentes puntos de Cataluña y del País Vasco pone en marcha el proyecto Non Stop Aliments: El camí de l’esperança, que consistirá en recorrer 600 kilómetros enlazando el GR1 y el GR7, «a pie y haciendo paradas de unas dos horas», en sólo 6 días. A lo largo del recorrido, que transcurrirá entre Sant Martí d'Empúries y Roquetes, «queremos recoger un kilo de productos destinados al Banco de los Alimentos por cada kilómetro que completamos. Es decir, en torno a 9 toneladas de comida» tal como explicaba ayer uno de los corredores que impulsan la iniciativa, Jordi Pàmies. Se trata, en detalle, de un «grupo de amigos, amantes de la montaña, que nos propusimos ir un poco más allá y tratar también de aportar alguna cosa a las personas que lo necesitan».

Por eso, «pensamos al hacer esta travesía, que requerirá un esfuerzo y toda una logística. Nosotros pondremos las piernas pero habrá mucha gente detrás que será esencial porque lo conseguimos», añade Pàmies. La intención es completar íntegro el trazado «todos unidos», conscientes de que «será difícil, no es una broma, pero seguro que lo conseguiremos». La fecha de salida que se ha fijado inicialmente es el 24 de agosto, con intención de estar de vuelta el día 29.

Puntos a lo largo del recorrido

Para alcanzar el reto se estima un coste logístico de cerca de 10.000 euros. Por eso, los deportistas y el Banco de los Alimentos hacen un llamamiento a patrocinadores que quieran tomar parte de este proyecto solidario y que se pueden añadir contactando a través del número de teléfono 977757444. Al paso de los 17 deportistas por los diferentes municipios por donde atraviese su camino, se habilitarán puntos de recogida de alimentos que se entregarán al Banco de los Alimentos. La entidad acepta también donativos económicos a través del sitio web www.bancalimentstarragona.org.ca/donacions.

El presidente del Banco de los Alimentos de las comarcas de Tarragona, Eusebio Alonso, agradecía ayer la iniciativa y recordaba que «en Tarragona, no hay una sola persona que pase hambre si nos conoce» y que «damos comer cerca de 25.000 personas diariamente». «El milagro es posible por proyectos como este», decía. La idea surge de uno de los deportistas, Marc Fernàndez, que había asumido anteriormente retos individuales y esta vez se rodea de al menos 16 personas más.