Llamamiento de los empleados de la basura de Reus para que mascarillas y guantes no acaben en la vía pública

Los empleados de la recogida de la basura y la limpieza vial en Reus se encuentran «cada día» guantes y mascarillas de protección contra la Covid-19 que «aparecen directamente al suelo» o «derramados en torno a los establecimientos que están abiertos». El colectivo pide a la ciudadanía que «deposite este material de protección en la basura» y no lo abandone a la vía pública porque «los trabajadores, después, lo tienen que recoger y llevar al sitio, con lo que eso comporta».

El secretario general de saneamiento urbano de la UGT en Tarragona, Ángel Martín de Sande, explica que cuando más artículos de este tipo se detectan es «los lunes y los martes y también los viernes y los sábados, que pensamos que son los días que las personas acostumbran a salir de casa para hacer las gestiones de toda la semana». De Sande valora que la actitud de los que dejan el material para evitar contagios usado en la calle «no es generalizada pero sí que está presente».

El retorno de algunos colectivos a sus puestos de trabajo preocupa el personal de la basura que teme que eso «trastoque la situación en que están las calles ahora, donde se preserva mucho más la limpieza.» Por este motivo «hacemos un llamamiento al civismo». Tanto el gobierno de Reus como, de manera directa, el alcalde Carles Pellicer han insistido en los últimos días en la importancia de hacer un buen uso de los contenedores. De Sande explica que todos los empleados de la limpieza disponen de los pertinentes equipos de protección y hacen uso durante su jornada laboral.

El Ayuntamiento usa lejía al 1%

Hace semanas, el Ayuntamiento ya decretó servicios mínimos en este ámbito y la empresa encargada de la limpieza y la recogida de la basura, que ha generado ahora un turno de guardia para intentar blindar la plantilla contra el coronavirus, «garantiza en todo momento que nada quede desatendido». «Al menos hasta ahora, a toda la zona de Tarragona no hemos detectado ningún contagio de ningún trabajador», asegura De Sande. El personal de FCC se encarga también de la desinfección de espacios públicos, que «se hace con especial intensidad en torno a los comercios de alimentación, farmacias, centros sanitarios, hospitales y sitios de especial concurrencia» pero igualmente a calles y otros puntos donde se nos ha indicado que era conveniente realizar esta acción. También en las islas de contenedores, donde «hemos detectado que hay gente que tiene miedo a tocar y abrir las tapas para dejar la bolsa y no tiene que tener».

Fuentes municipales precisan, en este sentido, que «la desinfección se realiza con una solución con lejía al 1%, siguiendo las recomendaciones de Salut» y que se interviene «con dos sistemas: individual, con un operario con mochila; y con sistema dual, con una camioneta y un operario con manguera». El sistema también se aplica en torno a residencias para personas de la tercera edad o a los mercados.

Aunque en un primer momento se registraron algunas quejas de vecinos que reclamaban la higienización de su zona concreta, el presidente de la Federació d’Associacions de Veïns de Reus (FAVR), Marcos Massó, explica que «el servicio de desinfección nos parece correcto e, incluso, si algún fin de semana se ha requerido que se aplicara en algún barrio, desde el Ayuntamiento también se ha respondido a la petición ni que fuera en domingo». Massó pide igualmente «colaboración» a todo el vecindario para mantener la ciudad limpia porque «es una cuestión importante».