Culmina la construcción del poliligero anexo a la Cèlia Artiga

Cerca de un año después de haberse puesto en marcha, las obras por la construcción del poliligero anexo a la Escola Cèlia Artiga han llegado a su fin. Así lo confirman fuentes municipales, que dan por terminados los trabajos ahora a la espera de que pueda producirse el estreno del equipamiento. El de la Cèlia Artiga era uno de los dos nuevos poliligeros proyectados en la ciudad, junto con el de la Escola Joan Rebull que recientemente ha visto levantada su estructura. El equipamiento ha costado casi 1,2 millones de euros –presupuesto muy similar al de Joan Rebull- procedentes del remanente de tesorería del ejercicio 2017, que se fijó en 3,5 millones y se invirtió en nuevos espacios deportivos a raíz de un acuerdo con el PSC. El resto del importe se destinó a la elaboración del proyecto del futuro pabellón doble del Molinet, que ha salido de nuevo a concurso en mayo después de que una primera licitación resultara desierta.

El polligeuger de la Cèlia Artiga tendrá una superficie de 2.245 metros cuadrados con una pista polideportiva de 22x44 metros, apta para la práctica de baloncesto, voleibol, fútbol, hockey y patinaje, entre otros. En la zona de urbanización exterior se instalará más mobiliario que tendría que incluir un punto de aparcamiento de bicicletas, papeleras y bancos. Su construcción generará, de rebote, nuevas zonas para diferentes usos, según reflejaba el proyecto. Una de ellas quedará ubicada entre la fachada lateral del poliligero y los jardines Tirant Lo Blanc, con la voluntad de crear «espacios de socialización para la gente del barrio que utilice el equipamiento fuera de las horas de clase». En este punto, que ejercerá de vínculo entre elmismo poliligero, la pista y el jardín, «se propone una plantación y una zona de juegos». El poliligero tiene como objetivo «mejorar las condiciones de confort de la pista descubierta y de los vestuarios con que cuenta la Escola Cèlia Artiga para el disfrute de mejor calidad deportiva del alumnado, a la vez que se propicia el deporte en el barrio y se utiliza más útil el equipamiento, integrándolo en la zona», donde también lo podrá hacer el conjunto de la ciudadanía y no sólo la comunidad escolar.

Tres franjas horarias

El uso social de los nuevos poliligeros –tanto este como el de la Escola Joan Rebull, una vez se termine– seguirá la línea de los que ya existen en Reus. Es decir, ambos tendrán una distribución de tres franjas horarias diferentes: horario escolar (destinado a actividades docentes propias del centro escolar o, puntualmente, de centros próximos), horario extraescolar (dl lunes aviernes al mediodía y en horario correlativo al escolar por la tarde, también para competiciones escolares los sábados por la mañana) y un horario social de uso deportivo para proyectos y programas municipales, entidades deportivas, vecinales y actividades de deporte para todo el mundo (de lunes a domingo).

El de Joan Rebull, a final de año

Paralelamente, las obras de construcción del poliligero vinculado a la Escola Joan Rebull han acabado la semana pasada la instalación de la estructura metálica, con el montaje de 12 pórticos que configuran la nave del equipamiento deportivo. En este caso, las obras han tenido que reprogramar el calendario a raíz de la incidencia de la COVID-19 y está previsto que culminen a finales de año.