Tradición
La campana de la Iglesia de la Sangre de Reus vuelve a sonar después de 15 años
El Prior bendijo el renovado elemento del templo en el día de la Purísima Sangre
La campana de la Iglesia de la Purísima Sangre de Reus ha vuelto a sonar después de 15 años sin hacerlo. Este elemento ha sido reparado gracias a una campaña de mecenazgo que ha recogido 6.000 euros que se han destinado íntegramente a la reparación y modernización de la campana, que volvió a sonar ayer en torno a las 11.15 de la mañana.
La fecha, el 5 de julio, no es una cualquiera, ya que es la fiesta de la Purísima Sangre, una celebración instaurada en el siglo XIX por el papa Pío IX y que, por lo tanto, puso un toque más especial a esta inauguración. Con todo, en un primer momento tenía que volver a funcionar durante la Cuaresma y Semana Santa, pero la pandemia retrasó los plazos. El Prior, Joan Antoni Cedó, acompañado por el Clavario de la Sangre, Francesc Pardo, y el alcalde de Reus, Carles Pellicer, se encargó de bendecir la campana que, posteriormente, volvió a sonar después de que los tres lo autorizaran desde un teléfono móvil. Y es que esta es una de las novedades que incluye la campana, que tiene un sistema mecanizado para hacerla sonar que se activa a través del teléfono móvil. Después de la bendición y hacer el toque de fiesta se procedió a realizar la misa de la fiesta de la Purísima Sangre.
Ahora, la campana de la Sangre se escuchará cada hora desde las 9 a las 21 h. entre semana y de las 10 hasta las 21 h. los fines de semana. Además, también se hará sonar cada día a las 12 h., por el Ángelus, para todas las misas y cuando haya algún acontecimiento como una celebración o un entierro, para Corpus, para Sant Pere o el viernes Santo con la salida del Sant Crist, por ejemplo. También tocará las 12 campanadas el 31 de diciembre.
Relevo de Clavario
Durante los parlamentos, los asistentes se llevaron dos sorpresas, una por parte del Clavario y el otro por parte del alcalde. Pellicer dijo que la entidad recibirá la medalla de la ciudad por su trayectoria durante los 465 años. Por su parte, Pardo anunció que dejaba el cargo, como marcan los estatutos, después de dos años al frente. Ahora, su sustituto será el subclavario, Josep Ramon Piñol. «Han sido dos años muy bonitos, hemos podido recuperar la escalera|escala del Sant Crist, el reconocimiento de la coronación o la campana de la Sangre,» comenta Pardo, quién añade que «me llevo el calor de la gente».