Vivienda
La Casa dels Mestres sumará pisos al parque municipal de alquiler social
El edificio pasará a estar gestionado por Redessa, que reformará de entrada 4 viviendas y espera ponerles a disposición en septiembre
El interior de la Casa dels Mestres vivirá obras de reforma. La gestión del edificio de viviendas de propiedad municipal ubicado en el número 3 del paseo Mata, que «hasta ahora se llevaba desde el Ayuntamiento y a través de departamentos diversos», pasará a corto plazo «en manos de Redessa», tal como explica al Diari Mésla concejala de Empresa, Conocimiento y Vivienda, Teresa Pallarès. En el inmueble se le aplicará un modelo muy similar al de las promociones de la Patacada, Granja Massó o Mas Bertran, los cuales configuran hoy el parque municipal de vivienda social, con 160 pisos.
De inicio, tal como detalla Pallarès, en la Casa dels Mestres «hemos detectado tres pisos vacíos los cuales rehabilitaremos, esperamos, con una ayuda que hemos solicitado a la Diputación de Tarragona y que querríamos poner a disposición hacia el mes de septiembre». El cambio de gestión «nos dará pie» a «incorporar al modelo de alquiler social 28 pisos», que se corresponden con la totalidad de los que tiene el edificio del paseo Mata.
En primer lugar, «lo que estamos haciendo es avanzar para que el Ayuntamiento haga, formalmente, el encargo para la gestión a Redessa». Paralelamente, además, «hemos empezado a hacer una diagnosis: cuál es el estado del edificio en qué pisos no vive nadie, etc.», explica la concejala que dice que «de momento, ya sabemos que hay estos tres pisos que no están habitables porque tienen problemas de humedades y actuaremos para ofrecerlos tan pronto como podamos hacer las obras». Además, hay también un cuarto piso en la Casa dels Mestres que quedaba vacante a raíz de la defunción del inquilino. De este, igualmente «nos haremos cargo y lo reformaremos con el fin de recuperarlo para el alquiler social». Las reparaciones de esta última vivienda son menores y no están incluidas, pues, en la solicitud de subvención a la Diputación.
Pallarès subraya que «tenemos una muy buena experiencia con los fines a 160 pisos de la Patacada, Granja Massó y Mas Bertran y queremos incorporar este espacio a la misma gestión que ya llevamos de viviendas de alquiler social». Está bajo esta gestión, valora a la concejala que, «podemos asegurar que todo el mundo esté bien ubicado. Que no pase, por ejemplo, de que una persona sola vive en un piso de cuatro habitaciones mientras una familia vive en un espacio es pequeño». En este mismo sentido, expresa, «quiero dar un mensaje de tranquilidad a los inquilinos que hay ahora porque es una propiedad municipal y no echaremos a nadie. Lo que queremos es racionalizar los alquileres y saber cómo está cada uno, si tienen necesidades, identificar si hacen falta reformas o evaluar las que se tengan que hacer».
Por eso, «de los 28 pisos, de aquí a finales de año iremos contactando con los inquilinos para saber cuáles son las condiciones de los contratos, entrar en contacto y que sepan que nos preocupamos». «Tenemos que atender a las personas que viven allí y que puedan ir viviendo allí» y «lo pondremos todo dentro de un mismo paraguas, lo de Redessa, para actuar con los mismos protocolos, respetando los contratos que haya, sin echar a nadie pero conociendo todas las especificidades». «Pasarán a ser pisos de alquiler social y queremos mejorar el acceso», concluye Pallarès. Con todo, «estamos respondiendo al decreto de vivienda del 2007 que decía que, en 20 años losmunicipios tenían que tener un 15% de vivienda de políticas publicas». «Ahora estamos en un 9,3% y no sé si llegaremos al 15% pero es seguro de que nos acercaremos», precisa.
En plaza Catalunya y barrio Gaudí
Más allá de la Casa dels Mestres, Redessa también rehabilitará un piso de propiedad municipal en la plaza Catalunya y otro en el barrio Gaudí, igualmente orientados a los alquileres sociales. En este caso, los trabajos se financiarán a través de recursos obtenidos con la venta de terrenos. El modelo de viviendas aisladas –fuera de promociones– «no es el que más nos gusta pero es una solución», acaba Pallarès.