Medio Ambiente
Sol i Vista reclama la remodelación de la riera, que «ahora es insalubre»
La AVV quiere «que se ejecute el proyecto del Plan de Barrios» porque este espacio «provoca ratas y mosquitos»
La Asociacióde Veïnsde Sol iVista reclama que se materialice «de una vez», el «proyecto de remodelación» de la riera que pasa por el barrio. Aunque este punto fue limpiado por el Ayuntamiento hace un par de meses, su estado actual provoca que «haya ratas y mosquitos» porque «por mucho que pasan las máquinas, lo que hay es lo que es y enseguida vuelve a generar problemas», tal como explica la presidenta de la entidad vecinal, Ana Belén Castaño. Los usuarios de los huertos urbanos municipales de esta misma zona, de hecho, ya denunciaron hace pocos días una plaga de roedores que se comen las cosechas y estropean las plantas.
Castaño explica que «hasta que no se reforme la riera no habrá una solución definitiva» y apunta que la intervención «estaba prevista en el Plan de Barrios de Sol y Vista e Immaculada». El Plan de Barrios ha expirado este mes de junio. En conjunto, Ayuntamiento de Reus y Generalitat de Catalunya sólo han invertido cerca de 1,8 de los 12 millones que el Plan preveía en un principio, aunque el gobierno reusense asegura que los topes en relación al presupuesto se habían rebajado unos años atrás a raíz de la anterior crisis económica. Desde el momento que el Plan tocó a su fin, Sol iVista había pedido que no se dejaran de destinar recurso al barrio. Ahora, Castaño recuerda que «la reforma de la riera es exactamente una necesidad que tenemos y que viene dada por una cuestión de salubridad. No es ningún capricho, necesitamos que se haga y una vez fue proyectado, lo vimos». «No tiene por qué haber, cerca de las casas de los vecinos, ni ratas ni mosquitos ni otros insectos, porque este es un lugar donde viven personas y estar así puede traer enfermedades», añade. Además, «hay algunos edificios vacíos en terrenos que son propiedad del Ayuntamiento y que se encuentran junto a la riera, que están en muy mal estado y a punto de caer» y «también querríamos que se derribaran porque llegará el momento que se hundirán por ellos mismos».
Un barrio sin ningún comercio
Esta no es la única cuestión que preocupa al barrio, que se ha quedado sin ningún establecimiento comercial y dispone ahora sólo de «dos bares». La Associacióde Veïns de Sol iVista estaba trabajando, antes de la irrupción de la pandemia, para solicitar al Ayuntamiento que impulse políticas que atraigan negocios en la zona, donde «hay 300 casas». «Ni que sea por las personas mayores, necesitamos alguna tienda donde poder comprar cuatro cosas», dice Castaño.