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Economía

La deuda municipal de Reus se reducirá en más de 64 millones al cierre del 2020

La venta del Hospital Sant Joan al CatSalut propicia la mayor disminución de la etapa Pellicer y el Ayuntamiento mantiene vigente el PAM

Una imagen de archivo del Ayuntamiento de Reus.

Ayuntamiento Reus mercadoOlívia Molet

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Reus cerrará el ejercicio 2020 con una deuda de 121,27 millones de euros con las entidades financieras, según las previsiones de mismo Ayuntamiento a fecha del 31 de agosto. La cifra representa una reducción de 64,18 millones en relación al balance anterior, el del 2019, cuando la deuda se quedó en 185,45. La bajada es la más pronunciada con el PDeCAT en la alcaldía y, tal como valora la concejala de Hacienda, Mariluz Caballero, es el «fruto de una estrategia de control iniciada con la llegada de Carles Pellicer al gobierno, en un momento en que el Ayuntamiento estaba en colapso y no tenía músculo financiero».

Para localizar una disminución similar hay que remontarse al 2015, coincidiendo con el cobro del canon de Metrovacesa. La que se tiene que producir este año, sin perder de vista que ahora «se trata de una cifra estimativa a falta que transcurra el último trimestre», está estrechamente vinculada a la venta del Hospital Sant Joan de Reus. La operación bisiesta del centro hospitalario al CatSalut, que se consumó en julio, habrá liberado las cuentas municipales de cerca de 53,4 millones de euros de deuda, según el valor que se calculó a finales del 2019. El resto hasta llegar a los 64,18 millones se corresponde a «otras amortizaciones» y a «las renegociaciones que hacemos de manera constante con los bancos». Desde 2011 se han liquidado264,48 millones.

«En los últimos años», tal como detalla Caballero, «se ha puesto el foco en la reducción de deuda, en una buena gestión y contención del gasto, trabajo que se ha hecho con mucho rigor y eficiencia». El objetivo de limitar la deuda es que «cuanto menos haya, más capacidad de inversión tiene el Ayuntamiento». Y los efectos son tangibles: «Ahora que nos ha tocado afrontar una pandemia como la covid-19, tener controlado el endeudamiento nos ha facilitado no sólo encontrarnos en una situación solvente sino que nos hemos podido permitir acudir a los bancos», añade la concejala de Hacienda en relación a las pólizas recientemente contratadas para abordar los efectos del virus.

Con estos datos encima de la mesa, «acabaremos el año cumpliendo todas las ratios financieras y la ley de estabilidad presupuestaria» y «no tendremos que renunciar a nada». Caballero recuerda que «hemos sido de los pocos ayuntamientos que, con recursos propios, hemos hecho un Plan de Reactivación Económica y lo hemos hecho con la inmediatez que se ha visto» aunque «a día de hoy, todavía no hemos recibido ayudas del resto de instituciones». «Eso significa que, si no estuviéramos así, nos habríamos tenido que esperar y el Plan no estaría implementado todavía», precisa. No sobrepasar las ratios «nos daautonomía como en Ayuntamiento», añade Caballero, que dice que «Reus tiene experiencia al no haberlos cumplido y es una cosa que hipoteca mucho». La finalidad primera, expresa, es «poder tomar decisiones dentro del cumplimiento de estas ratios y no tener que pedir autorización», y dice que «disponer de un presupuesto ha estado importante porque nos ha permitido hacer los movimientos rápidos».

«La idea es no renunciar a nada»

De cómo ha repercutido la pandemia en los planes del Ayuntamiento, la concejala de Hacienda explica que «no ha afectado a las inversiones como tales sino posiblemente su ejecución porque hemos estado prácticamente tres meses en estado de alarma y eso significa que todo ha estado parado y que las cosas se han ido retrasando así». «Ahora mismo, sin embargo, no hemos renunciado a ninguna inversión», precisa, y subraya que «la idea del gobierno no es renunciar». «No sabemos qué nos encontraremos ni qué nos vendrá pero, de cara al próximo año, como Ayuntamiento, tendremos capacidad de endeudarnos y hay un Plan de Acción Municipal (PAM) que es vigente y que seguiremos desplegando», sostiene.

Los remanentes

El gobierno de Reus, que ha liderado la lucha para no ceder los remanentes al Estado, queda ahora pendiente de cómo se orientará su uso. Todavía a la espera de que la cuestión se resuelva, Caballero dice que «estamos trabajando de forma interna en todos los escenarios posibles» y que «se hará lo que más beneficie a la ciudadanía».

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