Judicial
Primera Instancia número 8 de Reus resolverá incapacitaciones y desahucios
El nuevo órgano se activará el 30 de septiembre, con nueve meses de retraso, y los jueces piden otro de Social y un Penal más
El nuevo Juzgado de Primera Instancia número 8 de Reus entrará en funcionamiento el 30 de septiembre. El órgano resolverá, tal como detallaba ayer la consellera de Justicia, Ester Capella, durante una visita a las instalaciones, «asuntos del ámbito civil» y «descongestionará los casos de incapacitaciones, de herencias y de arrendamientos». Activar Primera Instancia 8 «ha supuesto la incorporación de hasta nueve profesionales que acompañarán al juez en el proceso de dar respuesta a las necesidades de la ciudadanía». En concreto, se trata de cuatro tramitadors, tres gestores judiciales y dos auxiliares. Se hará cargo provisionalmente el magistrado Javier Ramos, que es titular de Primera Instancia número 7, juzgado creado precisamente dos años atrás y que hasta ahora era el último al ponerse en marcha en Reus.
La consellera destacaba ayer que el número 8 «resolverá, también, las situaciones de incapacidades» y «eso comportará más eficiencia y a la vez que haya una respuesta más unificada a estas cuestiones». Y subrayaba la incidencia en que tiene, en este último ámbito, la proximidad del Instituto Pere Mata, entidad de servicios de salud mental que atiende una amplia población de la comarca y genera un relevante volumen de trabajo en los tribunales. El octavo Juzgado de Primera Instancia «ayudará a aliviar la saturación que sufren los juzgados de primera instancia, en especial con respecto a internamientos».
El órgano se ubica en el edificio judicial de la avenida Marià Fortuny. Ocupará la segunda planta, entre el juzgado VIDO y el Juzgado de Primera Instancia número 7. Al abordar casos que hacen referencia a la jurisdicción civil, no dictará sentencias que impliquen penas de prisión y abordará «conflictos entre particulares o entidades, reclamaciones económicas, incapacitaciones de personas, desahucios, contratos de compraventa, herencias y de arrendamientos», entre otros. Capella explicaba ayer que «Justicia ha invertido 50.000 euros en la adecuación del espacio, el mobiliario y el equipamiento informático» necesario.
Primera Instancia 8 forma parte de un paquete de órganos judiciales que ahora empiezan a ofrecer servicio. Con todo, va cerca de un año tarde: su entrada en funcionamiento tendría que haberse producido el 31 de diciembre del 2019, pero se aplazó.
Limitaciones al teletrabajo
El juez decano de Reus, el magistrado Diego Álvarez de Juan, apuntaba ayer coincidiendo con la presentación del nuevo juzgado que «la puesta en marcha del octavo juzgado, es todo un hito en Reus». «Cuando yo llegué aquí, hace siete años, había seis juzgados y era un drama. Hoy, no lo es tanto porque se han abierto dos juzgados en dos años», añadía, y decía que «espero que no tengan que pasar otros 15 años para que se abra el siguiente». Eso, precisaba Álvarez de Juan, «no quitará que haya también otras necesidades, y ahora mismo hay dos muy importantes: el segundo Juzgado de lo Social y el tercer Penal. Preocupan mucho las dos situaciones pero seguramente el Penal es prioritario». Los Juzgados de lo Penal de Reus «están trabajando a un ritmo brutal, ponen más de 450 sentencias al año cada uno de ellos, más de una al día, y los juicios rápidos de violencia de género se están yendo al 2021. No pueden dar más».
Capella adelantaba ayer que los Juzgados de Reus entrarán en otoño con un total de 62 ordenadores portátiles. En este sentido, el juez decano detallaba que «son sobre todo para la jurisdicción civil y social, donde hay expediente digital, pero a la jurisdicción penal no hay. Y un funcionario de esta, por lo tanto, no puede teletrabajar». Aunque «los medios materiales que hay no son los mejores», el problema más relevante es «de recursos humanos, los cuales gestiona la Generalitat,» como «bajas que tardan seis meses en cubrirse». Eso, «lo sufre el ciudadano» y «no es puntual».