Vivienda
Tapian un piso de la calle Alt del Carme de Reus que estaba ocupado por siete personas
La comitiva judicial se dirigió al inmueble ayer por la mañana y procedieron a cambiar la cerradura una vez comprobaron que en el interior no había nadie
La comitiva judicial echó de un inmueble a siete personas que estaban ocupando un piso en la calle Alt del Carme, aunque en el momento de la intervención no había nadie. En concreto, se trata del número 20 y, según indican los curadores del propietario del piso, «nos han comentado que era una familia árabe». De hecho, ellos mismos detallaban ayer que «ha venido parte del juzgado, y cuando han llegado no había nadie en el interior así que han cambiado la cerradura».
Para asegurarse que este piso no vuelva a estar ocupado, los propietarios han decidido tapiar el balcón, instalar una alarma y poner una puerta con doble cerradura. «Tapiamos el balcón porque es por donde entran, escalan por aquí. Ahora lo tendremos tapiado hasta que lo reformen y en la puerta pondremos la doble cerradura de seguridad», detallan los curadores, que añaden que «tapiar la puerta no es nada más que demorar 10 minutos más la ocupación porque tiran la pared y vuelven a romper la cerradura». Es por eso que han decidido poner una alarma, «de esta manera si entran en el piso, podemos alertar a la policía y, en vez de una ocupación, será un intento de robo».
Un año y medio ocupado
«El piso estaba vacío porque el propietario murió y cuando quiso entrarsu hijo, nos encontramos con que estaba ocupado», relatan los curadores, que añaden que «de eso ya hace un año y medio aproximadamente». Fue en aquel momento cuando decidieron denunciar el hecho en los juzgados que acordó liberar el inmueble«en abril o mayo», pero «se aplazó por la covid hasta julio». Una vez se llegó al mes de julio, también se volvió a aplazar hasta ayer por la mañana que ya se hizo efectivo.
Ahora, «la intención es reformarlo y que venga a vivir la persona que es propietaria». El piso tiene un total de 21 metros cuadrados con una habitación, un lavabo, una cocina pequeña y el comedor, sin embargo, durante un año y medio han estado residiendo en él, de manera ilegal, hasta siete personas a la vez. Sobre los ocupas, «un vecino nos ha comentado que hacían mucho ruido por la noche, eso molestaba mucho a los vecinos, además, tenían la luz pinchada», relatan los propietarios. Aparte, en este mismo bloque, el número 20, todavía hay tres pisos más ocupados de los seis que hay disponibles en total.