Los Bons Reus «superan las expectativas» de los comerciantes y animan las ventas

El recuento final de los Bons Reus descargados hasta las doce de la noche de este domingo, cuando acababa el periodo de tiempo para recogerlos, ha dejado un total de 62.935 buenos activados. La cifra ha tenido un muy buen recibimiento por parte de las entidades comerciales de la ciudad, que coinciden al valorar en que «supera las expectativas». Tanto El Tomb de Reus como la Unióde Botiguers de Reus esperan que esta campaña «haya llegado para quedarse», que tenga nuevas ediciones y que se abra a otros públicos y sectores.

Según los datos de la Agència Reus Promoció, cada bono de 5 euros genera una media de 27,7 euros de compra. Hasta estos momentos, se han utilizado cerca de 32.000 buenos. Por eso, el Ayuntamiento fijaba ayer en 886.000 euros el impacto económico actual de las compras efectuadas en el comercio, la restauración y diferentes servicios. El objetivo con que se presentó la campaña Bons Reus era recuperar la demanda en los establecimientos. En este sentido, el presidente de El Tombde Reus, Jacinto Pallejà, explica que «toda piedra hace pared» y sostiene que «seguro que ha servido». Por su parte, la presidenta de la Unióde Botiguers, Meritxell Barberà, comparte este balance «muy positivo» y dice que «se ha conseguido plenamente la finalidad que se buscaba». «Esta es una muy buena acción porque se benefician tanto el tendero como el ciudadano», añade, y subraya que «estimula las ventas».

Que no se pierda ninguno

Por sectores, el sector donde mejores se han gastado hasta ahora ha sido el de la moda (41,12%), seguido de la restauración (15,05%). Los otros con más consumo han sido la peluquería y estética (9,41%), los deportes (8,37%), el hogar y decoración (6,86%) y, finalmente, las librerías (un 5,14%). Probablemente todavía quedan muchos en que no se han intercambiado porque «a menudo esperamos hasta el último momento y habrá gente que se los cogió a última hora y ahora mirará a qué los quiere destinar». Hay que ver, ahora, cómo afectan a las nuevas restricciones por la crisis sanitaria en determinados sectores –con centros de estética cerrados y la restauración sólo para llevar–, teniendo en cuenta que «comportan menos movimiento en las calles». Los bonos se pueden intercambiar en los quince días posteriores a su obtención. La previsión con que se trabaja es que los fondos destinados a los bonos que no se acaben gastando o que no se han descargado no se pierdan sino que puedan repercutir también en la recuperación económica de este ámbito.