El gobierno de Reus dedica el remanente a la deuda y recupera 635.000 euros de intereses

El gobierno de Reus destinará el remanente del 2019 a reducir el endeudamiento en 2 millones de euros. El movimiento permitirá un ahorro presupuestario de 635.000 euros en concepto de amortización de préstamos y gastos financieros, intereses que ya no se tendrán que pagar. Los 635.000 euros se incorporan al presupuesto del Ayuntamiento para el 2021, que ronda los 122 millones. En paralelo, tal como explica al Diari Més la concejala de Hacienda, Mariluz Caballero, el gobierno se endeudará de nuevo por 2 millones –ahora «en condiciones más ventajosas»- que se aplican al Plan de Inversiones del 2021: con este préstamo, la cantidad que se dedicará a proyectos es de 8,5 millones de euros, cerca de un 30% superior a los 6,5 millones del ejercicio anterior.

El alcalde de Reus, Carles Pellicer, fue uno de los alcaldes al frente de la lucha del mundo municipal para disponer libremente de los remanentes. La liberación de los fondos se hizo posible por acuerdo del Congreso de los Diputados del 20 de octubre, una fecha que ya «impedía su aplicación efectiva y llena dentro de este ejercicio». De aquí que el gobierno haya optado finalmente por volcarlos areducir deuda, en lo que entiende como «la alternativa que permite sacar el mayor rendimiento de los remanentes en términos presupuestarios» dentro de este contexto. Caballero precisa que «en Reus siempre hemos estado trabajando en varios escenarios, dependiendo de lo que el gobierno central nos permitiera hacer» y que «lo que reivindicábamos los ayuntamientos era tener uso libre» del dinero. La alternativa de la reducción de deuda era precisamente una de las pocas que ha estado disponible siempre, también antes de la decisión del Congreso, y «era uno de los escenarios que, también, hemos tenido siempre encima de la mesa». «Antes del Plan de Reactivación, pensábamos enutilizar los remanentes si los tuviéramos», precisa la concejala de Hacienda, que dice que «como eso no llegaba y no era una posibilidad, pusimos en marcha el Plan con recursos propios». Llegados en el mes de octubre, «el gobierno central ahora sí que lo permite sin embargo «para poder utilizar los remanentes libremente tendríamos que gastarlos antes de finales de año, y los ayuntamientos no tenemos tiempo material: quedan menos de dos meses y las licitaciones, compras o facturas tienen unos plazos».

«Optimizamos la fórmula»

Así, «decidimos amortizar los 2 millones de euros de créditos y eso nos permite recuperar 2,6: 635.000 euros que se incluyen en el presupuesto ordinario del 2021 y otros 2 millones que forman parte del Plan de Inversión 2021». Todo genera «un juego de partidas que también nos ayuda a hacer un planteamiento diferente», precisa Caballero, que incide en que «estas alternativas se presentan cuando somos un ayuntamiento que tenemos las ratios controladas y que hemos ido adaptando el presupuesto de acuerdo a las nuevas necesidades y a la contención de gasto en aquello que no era imprescindible». Todo, «nos ha colocado en un momento en que hemos podido decidir qué hacer con este dinero» y «optimizamos la fórmula para utilizar mejor la operación y para tener una capacidad de inversión superior a la inicialmente prevista». Si el Congreso hubiera tomado el acuerdo antes, «la situación habría sido diferente porque, en medio año, los ayuntamientos tienen más margen de maniobra», valora Caballero, aunque insiste en que el de la deuda «era un escenario que siempre contemplábamos».

Así como los 2 millones tienen un traslado concreto –van a ampliar lo que se dedica al Plan de Inversiones del 2021–, los 635.000 euros de amortización de préstamos y gastos financieros «han significado menos gasto y se han podido distribuir, no han ido a una partida determinada mientras que en otras condiciones habrían formado parte del pago de un préstamo». Del nuevo préstamo de 2 millones, el pago de intereses no empezará hasta de aquí a un par de años. La deuda municipal se habrá reducido en más de 64 millones al cierre del 2020.