Diari Més

Denuncia

Novias denuncian que una tienda de Reus «ha cerrado y nos ha dejado sin el vestido ni el dinero»

Aseguran que pagaron la reserva a Clase Innata y nunca han llegado a recibir los modelos, sostienen que hay casos desde el 2019 y algunas han tenido que aplazar la ceremonia

Imagen de la establimet Clase innata, en la calle Galera de Reus.

Núvies denuncian que una tienda de Reus «ha cerrado y nos ha dejado sin el vestido|traje ni el dinero»Olívia Molet

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«Me recibieron con total normalidad, la atención fue excelente, escogí lo que sería mi vestido de novia y dejé pagado un 25% de su precio para reservarlo; eso fue en agosto y nunca he llegado a hacer ni una prueba». Lo explica A.V., que se casa a finales del 2021 y ya ha empezado a buscar alternativa después de que «la tienda Clase Innata haya cerrado y desaparecido sin entregarnos el vestido ni a mí ni a muchas otras novias que habían comprado uno y no lo tienen».

La mujer, que ha contactado con el DiariMés con el fin de «hacer un llamamiento a otras afectadas», mantiene que el comercio, ubicado en la calle Galera de Reus, «hace tiempo que tiene la persiana bajada, las llamadas restringidas y quien ha podido hablar únicamente ha recibido excusas». Este rotativo ha intentado contactar con el establecimiento sin conseguirlo. Los negocios de la zona confirman que en el local no ha habido actividad al menos desde el mes de septiembre y que son numerosas las novias que se los han dirigido en este tiempo explicando que pagaron un vestido que no han recibido. A.V. y un grupo de novias en la misma situación quieren «hacer difusión» de sus casos para «que eso no siga pasando». Ella, como otros, ha presentado denuncia por los hechos ante los Mossos d'Esquadra.

Entre las mujeres perjudicadas, «una de las primeras es de noviembre del año pasado. No tuvo más noticia de su vestido y se acabó casando en agosto con otro que compró el mismo mes a Ricart Núvies». También hay «una que se casa en mayo y que no sabe qué podrá hacer». La mayoría de ellas acudieron al comercio, que también vende ropa de invitada y complementos, animadas por las buenas referencias que acumulaba en diferentes páginas web del ámbito de las bodas, sin saber que «que los vestidos que escogíamos con tanta ilusión no los llegaríamos a recibir.

«Han jugado con mis sentimientos»

A.V. lamenta que «jugaron con mis sentimientos porque incluso me puso el ramo, y me hizo andar al lado de mi padre, cuando no pensaban hacerme ningún vestido.» En la tienda, según relata, «no había datáfono, hice un ingreso en una cuenta bancaria», cosa que en aquel momento no me pareció nada extraño pero ahora, si me detengo a pensarlo, era un síntoma que pasaba alguna cosa». Mirando atrás, «veo que los vestidos que tenían de muestra eran sólo tallas muy pequeñas, no sé si las habrían comprado a bajo precio en algún lugar». Hace algunas semanas los propietarios del comercio «nos dijeron que habían ido a Madrid a abrir otra» y recientemente «a alguna le han explicado que no pueden venir por una cuestión de confinamiento, pero no nos creemos nada». A.V. quiere recuperar el dinero porque «el vestido ya no lo quiero ni regalado, sólo me haría pensar en el maldito día que entré en aquella tienda».

La novia que había encargado el vestido en noviembre se llama Mónica y pagó 500 euros por adelantado. Clase Innata «nos había dicho que lo tendríamos en febrero», pero no fue así. Mónica explica que «la madre de mi marido estaba enferma de cáncer y, por eso, nos era urgente poder hacer la boda en junio, porque queríamos que estuviera» sin embargo «el vestido no llegó, y tuvimos que posponerlo a agosto». Mientras desde la tienda «le echaban la culpa al coronavirus, aunque en febrero la pandemia todavía no había llegado», la madre del chico empeoró. «Ni tampoco sabiendo cuáles eran las circunstancias llegaron a darnos el vestido», lamenta, y dice que «nos insistía en que aplazáramos la boda al 2021 porque decía que lo estaban haciendo todas las clientes». Para poder casarse sin esperar más, tuvo que comprar otro a última hora a Ricart Núvies. Todo, además, teniendo en cuenta que las restricciones vinculadas a la covid en agosto eran mucho más severas que las que se aplicaban en junio. La familia ha puesto el caso en manos de abogados porque no quieren que lo que los ha pasado, y el padecimiento, quede impune. Después de múltiples reclamaciones, han iniciado movimientos por la vía administrativa.

Las bodas de plata

Otra afectada es Milagros, que celebrará sus bodas de plata el 5 de junio del 2021. «Para mí, es como si fuera la boda porque cuando me casé no pude celebrar como me habría gustado», dice. De momento, sin embargo «me he quedado sin dinero y sin vestido». Milagros acudió a Clase Innata en verano y aportó 100 euros para reservar el modelo que le gustaba, y en octubre completó los 900 restantes. Hace pocos días «mi nuera vio en Facebook que había otras mujeres que denunciaban de lo que no tenían el vestido y, desde entonces, he estado tratando de contactar con la tienda y tienen las llamadas restringidas». «Han desaparecido», dice, y explica que «supimos que el local era de Fincas Aragonès y hablamos con ellos, y nos han dicho que el alquiler tampoco lo pagaban, que están igual que nosotros». «Ya no dispongo de la cantidad de dinero que he pagado, así que me tendré que buscar un vestido más sencillo», apunta. Milagros pide que «si eso tiene que quedar así, me dejen entrar en la tienda, porque dentro está el vestido de prueba del mío, y con aquel ya podría casarme, pero sé que no es posible.»

Muchas de las novias, como Y.F., explican que el comercio las ha bloqueado en redes. Ella reservó el vestido en diciembre del 2019 porque se casaba este agosto pero, por la covid, lo aplazó a mayo del 2021. A raíz de eso, en la tienda «me han estado diciendo que la prioridad eran las novias de 2020 y que no tenían todavía ningún vestido para el 2021, que me avisarían» sin embargo, después de varios intentos, «ahora hemos visto que la tienda está cerrada». «No he hecho ni una prueba y en cinco meses me caso», dice, y explica que «el vestido ya no lo espero, pero sí que quiero que eso no lo sufra ninguna novia más». Ella también ha denunciado ante Mossos.

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