La Mulassa de Reus viaja a Barcelona para formar parte de una exposición a las fiestas de Santa Eulàlia

La Mulassa de Reus, conjuntamente con otras figuras de bestiario históricas de toda Cataluña, formará parte de una exposición organizada para conmemorar el séptimo centenario de la celebración del Corpus de Barcelona dentro del contexto de las Fiestas de Santa Eulàlia en la ciudad condal.

La muestra, organizada por la territorial de Barcelona de la Agrupació de Bestiari Festiu i Popular, estará instalada en el Born Centre de Cultura i Memòria y se podrán ver diferentes figuras de imaginería zoomórfica con un valor importante para el país. Así pues, además de la Mulassa de Reus, forman parte de la exposición la Cucafera de Tortosa, el Águila de Girona, el Bou de Barcelona y el Drac de Vilafranca del Penedès.

Desde la organización se considera que todas las piezas escogidas son figuras primordiales para entender la importancia del Corpus en la génesis de la fiesta actual. La muestra se complementa con otras piezas históricas, como son el 'cap de l'Àliga' de Cervera, el 'cap' de Guita de Cal Serraïs de Berga y el 'cap antic' del Bou de Solsona..

La exposición estará instalada del 7 al 21 de febrero. Compartiendo esta exposición de 'El Corpus es BESTIAL!'habrá otra exposición del bestiario infantil de la ciudad condal, y que demostrará que es cierto que la imaginería festiva está bien viva.

Entre los diferentes actos paralelos que se han organizado destaca la charla 'El bestiari del Comú i la Festa del Corpus'. Carles Freixes, director del Museu Diocesà i Comarcal de Solsona, dará una conferencia el martes 9 de febrero a las 20 horas en la Casa dels Entremesos de Barcelona. Para asistir a la charla hay que inscribirse previamente.

Según explica el conferenciante, dracs, leones, águilas, bueyes, mulasses... han formado parte de nuestro imaginario festivo durante siglos. Nacidos en las procesiones medievales del Corpus, tenían una función moralizante y representativa entre la población. Tiempo más tarde, los 'gegants' y 'bestiari'molestaban al poder y por este motivo sufrieron prohibiciones y decretos que querían suprimir su aparición. La tenacidad de cofradías, gremios y particulares propició el salvamento de algunas obras de la imaginería que han pervivido hasta nuestros días, dando como resultado un rico patrimonio dentro del panorama festivo catalán.