La URV reemprende las clases presenciales para los alumnos de primer curso de grado

La Universitat Rovira i Virgili (URV) ha reanudado las clases presenciales este lunes, aunque sólo para los alumnos de primer curso de grado. Es una de las novedades que ha permitido el Procicat de cara al segundo cuatrimestre a raíz de la petición de alumnos y los centros. En la facultad de Economía y Empresa a primera hora han ido tan sólo una decena de alumnos, pero se espera que a partir de la semana que viene se incremente el número de estudiantes. De todos modos, y para garantizar que se garantiza la distancia de seguridad, cada clase se ha dividido en dos grupos que se irán alternando: unos irán presencialmente al aula y los otros seguirán la materia telemáticamente.

El decano de la facultad, AntonioTerceño, ha remarcado que se cumplen todas las medidas de seguridad. De entrada no habrá ninguna aula con más de 30 personas, cuando en algunas la ocupación anterior a la pandemia podía llegar a las 132. Además del gel hidroalcohólico y la distancia entre sillas también se han colocado unos códigosQRmediante el cual el alumnado se registra. Esto permite tener un control de quien ha ido a clase cada día y facilita poder hacer la trazabilidad en caso de algún positivo de covid-19. Finalmente, en algunas aulas la salida se hace por el patio que hay detrás, con lo que se evitan encuentros en los pasillos.

Los pocos estudiantes que había este lunes estaban satisfechos de poder empezar una vida universitaria que hasta ahora no han podido hacer. Las asignaturas que se impartirán de momento son comunes a los grados de Administración y Dirección de Empresas (ADE), Economía, y Finanzas y Contabilidad. Un ejemplo es Matemáticas II y alumnos como Ivan Calderón han valorado positivamente poderla hacer de manera presencial. «Desde clase se aprende más. En casa hay problemas de conexión y la visión no es tan óptima», ha destacado. Los mismos alumnos se han quedado sorprendidos de los pocos compañeros que han tenido el primer día.JéssicaEspinosa, de primer curso deADE, lo ha atribuido a que «quizás no se sienten seguros». Aun así, ha destacado la tarea hecha por la URV en este ámbito.

Con todo, tienen ganas de poderse socializar. El decano ha apuntado que solo habían podido ir a la universidad tres semanas, en septiembre. «Esto no es conocer la universidad y su funcionamiento», ha expresadoTerceño. «Además de recibir conocimientos en clase, también hay la socialización del estudiante, crear un ambiente universitario que generesinergiasy que hace que ellos mismos aprendan mucho más», ha completado. Pero a pesar de que la experiencia este curso no será completa, el decano no cree que esto genere frustración o chasco entre los jóvenes, y ha afirmado que de momento no ha crecido la tasa de abandono de estudios.