Judicial
El TSJC reclama otro juzgado de lo Social en Reus para paliar el impacto de los ERTE
Lo único que hay en Reus tiene una tasa de entrada de asuntos del 180% y espera recibir los efectos laborales de la covid a medio plazo
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha solicitado al Ministerio de Justicia la creación de otro juzgado de lo Social en Reus –lo que sería el segundo dentro del partido judicial– en el marco del plan que el ejecutivo central saca adelante para «adecuar la planta judicial a las necesidades derivadas de la crisis de la covid-19 y garantizar a la ciudadanía la efectividad de la protección de sus derechos». El plan del Ministerio contempla generar «como mínimo 100» nuevas unidades judiciales por todo el Estado en un margen de tres años que empezó a correr el pasado 2020. En concreto, de cara a 2021 –año a que se vincula la petición de Reus– las unidades proyectadas serían 60, 10 de las cuales quedarían reservadas para Cataluña. Es entre estos 10 futuros juzgados y plazas que el TSJC considera «imprescindibles y prioritarias» la apertura del Juzgado de lo Social de Reus número 2.
Reus cuenta actualmente, por lo tanto, con un único juzgado de lo Social. En este sentido, el juez decano, Diego Álvarez de Juan, expresa que el órgano ahora existente tiene «una tasa de entrada del 180%», es decir, «recibe cada año un exceso de un 80%, un 80% más asuntos que los que está capacitado para absorber».
Se da la circunstancia que, «desde hace 7 años», hay «un refuerzo transversal para los juzgados de lo social de Tarragona y Reus, que reparte un 75% de su tiempo en Tarragona y el otro 25% en Reus» y «todavía con eso, entra un exceso de un 80% de asuntos». Esta cifra, «sólo porella misma, casi daría ya para un segundo juzgado», pero es que «además, tenemos un efecto covid-19 que está anestesiado pero que se espera que se manifieste a medio plazo, que después del verano haya un aumento significativo de la cantidad de procedimientos derivados de la covid, cuando se acaben los ERTO, cuando tengan lugar más despidos, etc.
La situación, «muy complicada»
A 31 de marzo de 2020, el juzgado de lo Social de Reus tenía unos 1.014 asuntos pendientes de resolver y este año son 1.300. La diferencia «se explica porque el año pasado no se hicieron juicios durante casi cuatro meses», pero «no es todavía el efecto de la covid por el incremento de litigiosidad, que se prevé más adelante». Entre el juez titular y el refuerzo, «aproximadamente, cada mes se señalan unos 120 juicios de la jurisdicción social en Reus, un volumen muy destacable de procedimientos», tal como añade Álvarez de Juan, que apunta que «para hacer una comparación, mientras que aquí tenemos una tasa de entrada del 180%, capitales de provincia como Valencia o Barcelona tienen unos mejores números que Reus o Tarragona», donde «la situación es muy complicada desde hace muchos años y, con lo que se espera por la covid, empeorará considerablemente». De hecho, y en Tarragona, el TSCJ también había reclamado uno nuevo Social, en su caso, para 2020, sin que se haya creado todavía. El refuerzo transversal «tiene funcionarios y secretario judicial, se invierten una cantidad de recursos que casi nos darían el sumatorio para hacer a otro juzgado completo».
La petición de uno nuevo Social en Reus ha estado recurriendo por parte del TSJC en los últimos tiempos, desde antes de la pandemia que amenaza con incrementar el colapso. El juez decano recuerda que «la situación de estar un 80% por encima del deseable se ha venido repitiendo desde hace 10 o 12 años, no es nueva». «Eso no quita», sostiene, «que la tasa de resolución es muy elevada: se están señalando unos 120 juicios en el mes en el juzgado de lo Social de Reus, que es un volumen muy grande». Sin embargo, «sabemos que hace falta un nuevo juzgado porque hace 7 años que tenemos un refuerzo», concluye. El refuerzo asume «unos 25 juicios en el mes y está señalando para febrero de 2022» y el titular «asume unos 90 en el mes y está señalando para septiembre de 2022», detalla Álvarez de Juan, que dice que «es así porque la carga es demasiado alto».
A finales de año o inicios del próximo
Se prevé que el impacto de la covid golpee la jurisdicción social «entre finales de este mismo año y principios del próximo año», ya que «de momento, el efecto social de la pandemia a nivel de cuestiones laborales se mantiene un poco dormido porque están en funcionamiento los ERTO; habrá un momento que los ERTO desaparezcan y habrá despidos y otros temas que provocarán un aumento grande». El proceso de activación de un nuevo juzgado, sin embargo, no acostumbra a ser rápido y, en este aspecto, Álvarez de Juan apunta que «nunca es tarde si el dicho es bueno».
«Si hoy entra un tema de violencia de género, el juicio será en junio de 2022» Al margen de un segundo juzgado de lo Social, «Reus necesita un tercer juzgado de lo Penal», tal como valora Diego Álvarez de Juan, que alerta que «hay un retraso en los juicios rápidos porque está todo ocupado antes de un año». Además, «estamos retrasando temas como la violencia de género», dice el juez decano de Reus, que precisa que «si un asunto de este ámbito entra hoy, el juicio se celebrará dentro de un año y pico, hacia junio de 2022.» «Una alcoholemia, un carnet de conducir... No tendrían que esperar, no es el ideal, pero no son una violencia de género; una violencia de género es otra cosa», apunta el magistrado, que explica que «sí que es cierto que hay medidas de protección y cautelares, que no se ven afectadas por las circunstancias de retraso del juicio porque seguirán en vigor, pero siempre es mejor que haya habido un juicio, que se resuelva y se dicte en su caso sentencia donde se condene o se absogui al acusado, y no dejarlo pendiente durante un año porque eso genera situación de indefinición a la víctima y el acusado». Los dos últimos juzgados que ha estrenado Reus son de Primera Instancia, el 7 –de familia– y el 8. Esta jurisdicción, ahora, «no significa que esté bien, pero sí que vive el mejor momento».