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Bienestar

El Centro de Alzhéimer de Reus recupera la terapia asistida con perros

Los usuarios del equipamiento trabajan, con Llum y Rita, ejercicios sobre motricidad fina o memoria

La terapeuta Mercè González con la perra Rita y dos de las personas que se tratan en el centro.

El Centro de Alzhéimer de Reus recupera la terapia asistida con perrosOlívia Molet

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El Centro Terapéutico de la Asociación de Alzhéimer de Reus y Baix Camp ha podido reanudar, desde hace un par de meses, la terapia con animales. Lo ha hecho a través de un nuevo proyecto que involucra dos perras, Llum y Rita. La intervención de los animales aporta a los usuarios «mayores beneficios a nivel físico, emocional y cognitivo», tal como explica Alexia Piédrola, la coordinadora de programas de Proyecto Tan Amigos, que realiza la actividad en el equipamiento. Las perras son adoptadas, habilitadas y adiestradas para llevar a cabo una tarea concreta: acompañar a los terapeutas, con los que conviven para «estar en un entorno familiar, en casa, y asegurar el vínculo». En este sentido, Piédrola expresa que las mascotas «no cargan con la responsabilidad» de las sesiones sino que «colaboran en ellas» y «para nosotros es muy importante que se sientan bien y que también ellos salgan beneficiados».

A causa de la covid, ahora en el Centro de Alzhimer se trabaja a partir de burbujas. Dos de ellas, cada una formada por una decena de usuarios, interactúan con Llum y Rita a través de actividades programadas. La terapia «se basa en ejercicios que buscan objetivos como trabajar la motricidad fina o la memoria, utilizando los perros como aliciente». A los usuarios, los animales «los ayudan en cuestiones físicas porque, a veces, ellos se tienen que mover, tienen que llevar el perro a algún lugar o superar algún obstáculo; y también los ayudan a mejorar la parte más cognitiva: tienen que tratar de recordar el nombre del perro, recordar el color de la caja donde se encuentra el premio con que le tendrán que dar...». Piédrola dice que «son un elemento motivador» porque «no es lo mismo buscar una bolita que buscar una golosina para entregarle al perro». De hecho, los usuarios esperan a los animales con considerable ilusión y, algunos, se sienten muy próximos y los abrazan y los besan. La guía de Llum y Rita es la terapeuta Mercè González.

Gran aceptación

La directora del Centro Terapéutico y de la Unidad de Memoria de la Asociación de Alzhéimer de Reus y Baix Camp, María Jesús Lerín, expresa que «la técnica asistida con animales es una terapia que siempre nos ha gustado mucho y que se detuvo por la pandemia y por falta de recursos económicos», y ahora «lo hemos recuperado, la tendremos hasta junio y esperamos poder implantarla para siempre». A los usuarios «les encanta, no ha habido ninguno que rechace los perros, y los perros también disfrutan». Más allá de las actividades programadas, «los animales también ayudan a los usuarios a andar, en problemas de marcha o equilibrio, o son, simplemente una alegría». Cori Sánchez, presidenta de la Asociación de Alzhéimer, destaca «el orgullo» de disponer de la terapia, que es posible a través de una beca del LaboratoriCeva.

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