Las cámaras de vigilancia de Reus llegarán a cuatro plazas más a finales de año

La tercera fase del plan de videovigilancia de Reus se desplegará a finales de año. Fuentes municipales precisan que la entrada en funcionamiento de las nuevas cámaras se producirá previsiblemente entre el último trimestre de 2021 y principios de 2022. En estos momentos, se están ultimando los proyectos para licitar el suministro de los aparatos y proceder, después, a su instalación en la vía pública. En concreto, se contempla que los dispositivos se coloquen al menos en la plaza de la Patacada, la plaza de la Cultura de la Pau, la del Baluardy la de Anton Borrell. El Ayuntamiento también adquirió a mediados del pasado 2020 una unidad móvil autónoma de videovigilancia, la cual todavía no ha entrado en funcionamiento y resta pendiente de que se imparta formación a la plantilla que se hará cargo, según las mismas fuentes.

«Tal como está todo, y teniendo en cuenta que está la pandemia, la cuestión es que las cámaras se acaben poniendo, ni que sea a finales de año», valora al presidente de la Associació de Veïns L'Harmonia del Carme, Josep Machado, que espera que el sistema «solucionará el problema de venta de droga que tenemos en la Patacada». Machado recuerda que «hace un tiempo ya se instalaron unas en la calle del Vent y, la verdad sea dicha, hacen su trabajo y han ido bastante bien». Por eso el líder vecinal confía en que «la gente estará más tranquila cuando haya también en laPatacada» donde, «nos preocupa la droga porque es un lugar por donde pasa mucha gente joven, hay la facultad y el instituto, y los chicos lo ven y no se puede permitir que ninguno de ellos acabe enredándose con eso, no queremos que se embadurnen». En la misma plaza «también hay ruidos por la noche y los vecinos, que no son pocos, se quejan», añade Machado, que dice que «las cámaras han sido una petición de los mismos vecinos». «Son puntos donde hay conflictos pero la policía ha hecho varias actuaciones y está haciendo trabajo, y hace falta pensar que con las cámaras todo pueda mejorar», concluye.

El sentimiento es similar a la plaza de la Cultura de la Pau, donde el presidente de la asociación de vecinos, Víctor Muñoz, apunta que «mientras se coloquen y realmente sirvan para tener la zona un poco más segura, para nosotros estará perfecto». Muñoz constata, con todo, que «la situación aquí ha mejorado considerablemente» en los últimos tiempos y que «los jóvenes que generaban problemas se marcharon y no han vuelto». «Desde que creamos la asociación, y con el tema de que ha habido presencia policial, estamos mejor», apunta, pero dice que «no cantamos victoria, no rebajamos a la guardia, y todavía queremos las cámaras porque no queremos volver atrás». El presidente de la entidad explica que, en colaboración con el Ayuntamiento, se han reubicado algunos elementos de la zona de parque infantil y otros se moverán próximamente, y que se han puesto jardineras de grandes dimensiones que dificultan, entre otros, los partidos de fútbol entre jóvenes adultos.

«Funcionan y nos ayudan mucho»

La concejala de Seguretat, Dolors Vázquez, valora que «las cámaras ayudan a aumentar la sensación de seguridad del vecindario, son un elemento disuasivo importante en el ámbito de la seguridad ciudadana y complementan el servicio de proximidad de la Guardia Urbana. Funcionan muy bien y nos ayudan mucho». «Ahora seguimos trabajando en el despliegue del Plan de Videovigilancia, ultimando los proyectos para la licitación de la tercera fase», concluye.