«El problema del acoso no es la fiesta, es de carácter estructural»

— ¿De donde parte la necesidad de establecer la nueva conselleria de Feminismes i Igualtat?

— Hay una serie de desigualdades, como el machismo, LGTBIfòbia, capacitismo, racismo, etc. que requieren una estructura fuerte al mismo nivel que otras conselleries para poder llevar a cabo este trabajo transversal.

— ¿Cuál es la agenda de trabajo de la conselleria?

— La conselleria cuenta con una agenda de trabajo propia centrada en erradicar las violencias, pero al mismo tiempo planteará junto con otras conselleries diferentes políticas públicas.

— ¿Qué pueden hacer las administraciones públicas para erradicar estas violencias?

— Hace falta una acción simultánea coordinada de las diferentes administraciones públicas. Es necesario un enfoque integral, desde la prevención al posterior acompañamiento de las víctimas, y que abarque todos los ámbitos con un trabajo interdepartamental.

— ¿Y qué puede hacer la ciudadanía?

— La corresponsabilidad de la población a la hora de denunciar las agresiones es imprescindible.

— Con su experiencia elaborando planes de igualdad para diferentes instituciones, ¿cuál es su impacto real ?

— Los planes de igualdad son una herramienta muy potente para avanzar en la paridad y erradicar las desigualdades, ya que parten de la diagnosis. De esta manera ponen de relieve todas las desigualdades existentes en la empresa, algunas de ellas invisibles de otra manera.

— ¿Qué se puede mejorar?

— Incrementar la supervisión de su implantación es muy importante. También sería necesario que no sólo estuvieran centrados en la organización de la empresa, sino que obligue a las instituciones o empresas a aplicar esta perspectiva de género a los servicios o productos que ofrece.

— ¿Qué opinión le merecen los indultos anunciados el lunes?

— Como ha subrayado el presidente, son una medida totalmente insuficiente, ya que hay más de 3.000 personas represaliadas y otros en el exilio, por eso seguimos defendiendo la amnistía y la autodeterminación.

— ¿Qué significa para usted ser la pregonera este año?

— Es un privilegio poder hacer el pregón de la Festa Major como ganxeta que soy. En Reus he nacido, he crecido y vuelvo a menudo porque tengo la familia.

— ¿Nos puede avanzar alguo del pregón?

— Todos los pregones tienen un punto personal desde el bagaje y la experiencia de cada pregonero. Suele haber dos partes, una la conexión de los elementos de la ciudad que unen al conjunto de ganxets y ganxetes.

— Y la segunda?

— La manera en la cual cada uno lee la ciudad desde la posición que escribe el pregón. En mi caso, no sólo soy la consellera de Igualtat, sino que mi posición como feminista me acompaña en todos los ámbitos.

— ¿Cómo valora las medidas de prevención de acoso en el ámbito festivo?

— Por supuesto las medidas de protección existentes contra el acoso de cualquier tipo son indispensables porque ofrecen pautas de actuación tanto para la campaña de prevención como por la atención y el acompañamiento posterior en caso de sufrir alguna agresión.

— ¿Es la fiesta el problema?

— No. Las agresiones no se producen porque hay una fiesta, sino que el problema es de carácter estructural y requiere un trabajo permanente. Por lo tanto, la mejor manera de prevenirlas es invirtiendo en políticas de igualdad en todos los ámbitos de la vida y dirigiendo cualquier tipo de violencia.