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La AVV del barrio Sant Josep Obrer de Reus denuncia el incumplimiento del toque de queda

«Nos sentimos ignorados» asegura el presidente, quien culpa de la situación a la falta de patrullas de la Guardia Urbana en el barrio

Imagen de una de las noches de incumplimiento de confinamiento nocturno en barrio Sant Josep Obrer.

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El presidente de la Asociación de Vecinos Primer de Maigdel barrio de Mas Pellicer, Eduardo Navas, asegura que el incumplimiento del toque de queda nocturno «es constante» por parte de «vecinos incívicos» del barrio, más conocido como Sant Josep Obrer. Navas señala que se trata del mismo grupo que noche tras noche se reúne y hace botellades por el barrio «porque saben que no los pasará nada». Este sentimiento de impunidad que recalca el presidente de la asociación considera que es culpa de «la falta de efectivos de la Guardia Urbana en el barrio, tal como ya llevamos tiempo denunciando».

Navas asegura que el malestar entre «los vecinos honrados del barrio» va en aumento, ya que a «todas las tensiones de siempre» se le ha añadido últimamente el incumplimiento del confinamiento nocturno y nadie hace nada». Asegura que «se trata siempre del mismo grupito» aunque el número de personas varía según el día, «un día quizás son cinco y en el siguiente están veinte». Según palabras del presidente de la asociación, el grupo acostumbra a reunirse «detrás del bloque 42 o cerca del Centro Cívico Mas Abelló».

También asegura que es habitual que a las noches se cometan actos vandálicos por el barrio, como «la pasada noche cuando un vecino se encontró el retrovisor del coche roto» o la quema de vehículos estacionados por las calles del barrio, lo cual se ha convertido en una práctica recurrente por parte de algunos vecinos. «A mí ya me han quemado dos», afirma el mismo presidente, y «hace poco prendieron fuego al vehículo de otro vecino». Esta situación comporta que «muchos vecinos no se sienten protegidos aquí» y Navas cree que «se han marchado del barrio en torno a unas cuarenta familias en los últimos años» para alejarse de estos conflictos.

El presidente lamenta que no ven la manera de acabar con estas lacras del barrio sin la ayuda del Ayuntamiento, entre otros, reforzando la seguridad. «Como no vivimos en el centro de Reus, parece que no existimos», lamenta Navas comparando la presencia de patrullas del cuerpo policial a pie a los barrios más céntricos de Reus con la presencia en Mas Pellicer. Asegura que «cuando viene la Guardia Urbana, lo hace en coche y con las luces azules puestos» por|para lo cual «los ven venir de lejos y se avisan entre ellos» para evitar ser pillados. Sin embargo, el presidente lamenta que a menudo tampoco se les hace caso cuando alertan de casos de incumplimiento del toque de queda nocturno, el cual sigue vigente en la ciudad, como mínimo, hasta el día 20 de agosto. A pesar de todo, Navas asegura que «eso no es nada nueve» y afirma que «los vecinos del barrio nos sentimos ignorados por el Ayuntamiento de Reus», el cual considera que «no cumple las promesas que nos hizo» en cuanto a mejorar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.

Esperanza Galindo, la presidenta de la Asociación de Vecinos de Mas Abelló, cierre vecino de Sant Josep Obrer, asegura, sin embargo, que «no he recibido quejas con respecto al incumplimiento del toque de queda en el barrio». Galindo asegura que «es un barrio residencial y parece que todo el mundo está cumpliendo las medidas», aunque comenta que «a veces se ven restos en el parque de gente que ha estado comiendo y bebiendo». Sin embargo comenta que «no es la tónica general en la zona», refiriéndose a Mas Pellicer.

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