Los vecinos del Monestir de Reus quieren acabar con la dejadez del Mas Cot

Los vecinos del barrio del Monestir de Reus quieren que el Ayuntamiento los ayude a poner fin a la situación de dejadez en la cual se encuentra el llamado Mas Cot, situado en el paseo de Misericordia. El presidente de la Asociación de Vecinos (AVV), Alfonso Berbel, asegura que el terreno donde está ubicada la masía está «totalmente abandonado» y «lleno de bolsas de basura», por lo cual «hay muchas ratas». Además, lamenta que el estado de dejadez en el cual se encuentra la parcela también es visible con respecto a la vegetación. Los árboles que hay plantados, en su mayoría pinos, cubren parte del paseo de Misericordia a raíz de su gran dimensión y Berbel asegura que uno de ellos «está muy inclinado hacia uno de los edificios» vecinos.

Esta es la principal reivindicación de los vecinos del barrio y Berbel asegura que él mismo denunció la situación al Ayuntamiento hace tiempo, pero lamenta que más allá de qué «nos dieran la razón» a raíz de una inspección que llevaron a cabo los técnicos, no cambió nada. Berbel se muestra comprensivo y dice que «es un tema a largo plazo», ya que asegura que el terreno ahora «pertenece a un nuevo propietario» y probablemente el consistorio tenga que negociar con este» para poder llevar a término cualquier acción. Sin embargo, asegura que el estado en el cual se encuentra es «nefasto» y causa molestias entre los vecinos.

A mediados del mes de julio de este año, aprovechando la visita al barrio del Monasterio por parte del equipo de gobierno encabezado por el alcalde, Carles Pellicer, Berbel asegura que la asociación les trasladó de nuevo esta inquietud, entre otros relacionadas con la limpieza y el mantenimiento del barrio, sobre todo con respecto al equipamiento de contenedores. El presidente de la asociación de vecinos explica que los miembros de la junta enseñaron a los representantes del gobierno municipal el terreno en cuestión y «también nos dieron la razón». Berbel asegura que desde el consistorio se les dijo que trabajarían para arreglar el espacio, pero lamenta que «todavía nadie se ha puesto en contacto para decirnos en qué situación se encuentra» el envío y si «se limpiará o no» los alrededores de la Masía.