El Museo de Reus cede piezas de Gaudí por|para una exposición al MNAC y al Museo de Orsée de París

El Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) y el Musée d'Orsay están preparando sendas exposiciones temporales –de gran alcance– dedicadas a Antoni Gaudí i Cornet, en las cuales se expondrán –entre otros objetos relacionados con el genial arquitecto– diferentes documentos, manuscritos, dibujos y fotografías procedentes del fondo de los Museos de Reus (MR). Las exposiciones se inaugurarán, respectivamente, el 19 de noviembre de 2021 (en Barcelona) y el 11 de abril de 2022 (en París).

En total son catorce objetos originales: un cuaderno con apuntes, notas y dibujos de su época de estudiante y de los primeros años como arquitecto (MR 2121); cinco hojas sueltas con varios textos, croquis y dibujos (MR 1800, 1802, 1803, 2112 y 2117); seis hojas con diferentes dibujos o esbozos (MR 2113, 2114, 2115, 2116, 2218 y 2119); el retrato fotográfico del año 1878 (MR 1801), y el carné de expositor –con retrato fotográfico incluido– del año 1888 (MR 1798).

La importancia del fondo de Gaudí conservado en los Museos de Reus es evidente para conocer determinados aspectos de la vida y de la obra de nuestro arquitecto más universal. Son manuscritos, dibujos y otros documentos procedentes del taller-despacho de Gaudí situado en el templo de la Sagrada Familia. El verano de 1936, aquel taller fue asaltado y prácticamente destruido por un incendio que se llevó para siempre muchos los documentos y objetos dejados por el maestro. Por suerte, y sólo tres años antes, el también arquitecto reusense Domènec Sugrañes –albacea testamentario de Gaudí y su sucesor en el frente de las obras de la Sagrada Família- había separado una relativamente pequeña pero significativa selección, precisamente con el fin de atender la demanda de originales destinados a la sala dedicada a los hijos ilustres de Reus del entonces denominado Museo Municipal Prim-Rull, todavía en proceso de formación y de instalación (se inauguró en abril de 1934). Como muestra bastante signifcativa, describiremos brevemente dos de los dibujos que forman parte de los préstamos temporales establecidos con el MNAC y con el Musée d'Orsay.

En el dorso de una tarjeta personal de visita de Gaudí, de 7,7 x 11,8 cm, hay unos sencillos pero sugerentes croquis de la vitrina que diseñó para la guantería Comella, destinada a la Exposición Universal de París del año 1878. La vitrina, de hierro y cristal, fue elaborada en el taller Puntué de Barcelona y obtuvo una de las medallas de plata concedidas por el jurado de la muestra. Allí fue vista y admirada por Eusebi Güell, quien –de retorno a Barcelona- pidió que le presentaran al autor del diseño. El encuentro entre Güell y el arquitecto, tal como comentó Josep F. Ràfols en la biografía Antonio Gaudí (1929), inició una amistad muy fructuosa: «la relación del primer Conde de Güell con Gaudí no fue cosa casual y sin base, sino algo que merece calificarse de providencial en el sentido más alto de la palabra». Güell se convirtió en el mecenas de Gaudí, quien desde entonces tuvo acceso a unos clientes de gran nivel.

Cuando Gaudí ya era un arquitecto bien reconocido, la Junta de Administración del santuario de Misericòrdia de Reus le encargó una reforma de la ermita. A la instancia presentada al Ayuntamiento el 12 de junio de 1903, P. Alcalde exponía –como presidente– que «en una de laso últimas sesiones de la Junta se acordó empezar cuanto antes laso obras de construcción de una nueva fachada del Santuario, cuyo proyecto se ha encargado al distinguido arquitecto hijo de esta Ciudad, Don Antonio Gaudí». Del proyecto conservamos una hoja de papel, de 19 x 24 cm, con un croquis de la planta y dos esbozos de las reformas proyectadas para la fachada y la cubierta del edificio. Las obras se iniciaron en 1904, con la construcción de una valla perimetral, pero acto seguido se detuvieron a raíz de la reclamación de unos vecinos que veían dificultado el acceso a sus propiedades y de un informe desfavorable del arquitecto municipal Pere Caselles, sobre la estética de la valla provisional. Gaudí renunció a continuar la obra.